¿Se irá Pedro Sánchez de viaje con Begoña Gómez tras decidir si renuncia o no?

Pedro Sánchez mantiene al país en vilo. El líder socialista se encuentra en la Moncloa, inmerso en un período de reflexión para decidir si continuará al frente del Ejecutivo o no. El próximo lunes 29 de abril, comunicará su veredicto. Sin embargo, según informa Vozpópuli, el presidente del Gobierno ha movilizado los recursos de su departamento para emprender un viaje durante el puente de mayo. En otras palabras, su decisión ya está verbalizada ante la opinión pública. El equipo que acompaña al jefe del Gobierno está en alerta para desplazarse al menos desde el jueves 2 de mayo hasta el viernes 3.

Las fuentes consultadas no proporcionan detalles sobre el destino del viaje por razones de seguridad. El último desplazamiento de Sánchez fue el viernes pasado (19 de abril) a Bilbao, con motivo del cierre de campaña de las elecciones vascas. Antes de eso, entre el 17 y el 18 de abril, estuvo en Bruselas, participando en el Consejo Europeo. Previamente, realizó una gira europea que lo llevó a Varsovia (Polonia), Oslo (Noruega), Dublín (Irlanda) y Liubliana (Eslovenia) entre el 11 y el 16 de abril. Este viaje era con el objetivo de ganar apoyos para el reconocimiento del Estado de Palestina.

En cualquier caso, el viaje de Sánchez sugiere que, aunque su agenda esté en pausa, sigue planificando su labor al frente del Gobierno. Cabe destacar que, en caso de dimisión, Sánchez podría permanecer en funciones hasta que se nombre un nuevo presidente y se forme un nuevo gobierno. Alternativamente, podría designar a su sucesora, la vicepresidenta primera, María Jesús Montero, quien también asumiría la prerrogativa de nombrar un nuevo gabinete.

Hay que recordar que, constitucionalmente, no se pueden convocar nuevos comicios hasta que haya transcurrido un año desde la anterior llamada a las urnas; esto es el próximo 29 de mayo. Lo que la Constitución deja meridianamente claro es que el Ejecutivo cesa tras la celebración de elecciones generales, en los casos de pérdida de la confianza parlamentaria previstos en la ley de leyes -como la moción de censura o confianza-, o por dimisión o fallecimiento de su presidente. Y, en esas circunstancias, el gabinete cesante continuaría en funciones hasta la toma de posesión del nuevo Gobierno. Ya hay un precedente en democracia: la dimisión de Adolfo Suárez.