María Pombo y Pablo Castellano se enfrentan al problema definitivo: 'No aceptamos...'
El último y esperado proyecto de la influencer María Pombo y su marido, Pablo Castellano, está en peligro
La cuenta atrás para la llegada de la nueva edición de Suave Fest, el festival de María Pombo y Pablo Castellano, ha comenzado. Este año está previsto que dicho evento se celebre el próximo 14 de septiembre en el Palacio del Infante Don Luis, ubicado en el municipio madrileño de Boadilla del Monte.
Sin embargo, tal y como ha trascendido en lo últimos días, la edición de este 2024 podría tener algunos flecos sueltos que están poniendo en peligro su estreno.
Según han informado algunos medios de comunicación, el festival de María Pombo no cuenta por ahora con los permisos oficiales necesarios para poder llevar a cabo el show.
Aunque por ahora la mujer de Pablo Castellano no se han pronunciado al respecto, un portavoz del municipio de Boadilla del Monte ha dado un paso al frente:
“A día de hoy los promotores del evento no han presentado toda la documentación suficiente. Todavía no tienen autorización para celebrar el festival”.
Además, ha dejado muy claro que, aunque desean que el evento se celebre en su municipio, “no aceptamos presiones de nadie, por muchos seguidores que tengan en redes”.
María Pombo y Pablo Castellano tienen varios problemas para poner en marcha su festival
Durante una conversación con Infobae, un portavoz del ayuntamiento de Boadilla del Monte ha hablado del último problema que ha aparecido en las vidas de María Pombo y Pablo Castellano.
Tal y como ha asegurado, el equipo de María Pombo no ha presentado todavía toda la documentación necesaria para poner en marcha la última edición del Suave Fest. Aunque desea que este problema se solucione lo antes posible:
“Deseamos que el evento se celebre en Boadilla del Monte y, si puede ser, en el palacio, ya que supone una importante promoción para nuestro mayor atractivo turístico”.
Además, el representante de este municipio ha asegurado que “trabajaremos al máximo para hacer viable el proyecto”. Pero eso sí, “siempre respetando el interés de nuestros vecinos y el de la mejor preservación de nuestra joya del neoclásico”.
Momento en el que ha dejado muy claro que no van a aceptar presiones por parte de María Pombo y Pablo Castellano. “Todo depende de lo que quieran hacer y de las características del proyecto. Cuando tengamos toda la información, decidiremos”, ha añadido a continuación.
Por ahora, todo apunta a que vamos a tener que esperar saber el desenlace de este polémico tema. Lo que sí está claro es que las autorizaciones locales pertinentes siguen sin llegar.
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