Rubiales carga contra Irene Montero: 'se aprendió el nombre de Jenni Hermoso ese día'

Luis Rubiales ha vuelto al foco mediático. El expresidente de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) reapareció este martes en El Chiringuito y lo hizo con una entrevista cargada de reproches. Su blanco principal: la exministra de Igualdad, Irene Montero.

Durante la conversación, Rubiales respondió a las declaraciones que Montero, Pedro Sánchez y Yolanda Díaz realizaron tras el polémico beso no consentido a Jenni Hermoso durante la final del Mundial femenino. Con tono desafiante, el exdirigente aseguró que la exministra “se aprendió el nombre de Jenni Hermoso ese día”. Insinuando que hasta ese momento no había mostrado interés alguno por el fútbol femenino.

Rubiales aprovechó su intervención para defenderse de lo que considera una “persecución política y mediática”. Aseguró que sus palabras y gestos fueron “malinterpretados” y que el caso del beso fue “una exageración llevada al extremo por intereses políticos”.

En el programa se recordaron las duras críticas del Gobierno. Pedro Sánchez calificó el beso como “un gesto inaceptable” y consideró insuficientes las disculpas de Rubiales.

“Tiene que continuar dando pasos”, dijo entonces el presidente. Yolanda Díaz, desde Sumar, fue más tajante: “Lo que vimos fue una agresión. Esta persona debe dimitir”.

Pero fue Irene Montero quien, en su papel de ministra de Igualdad, pronunció una de las frases más recordadas del caso. “Cualquier acto sexual no consentido es violencia sexual”.

A ello respondió directamente Rubiales con su comentario más polémico de la noche. “Probablemente Irene Montero se aprendió el nombre de Jenni Hermoso ese día. Porque no se sabía el nombre de ninguna ni la entidad del fútbol femenino jamás”.

Sus palabras provocaron un fuerte impacto en redes sociales, donde el debate volvió a reavivarse. Muchos usuarios lo defendieron como una respuesta “a la hipocresía política”.

Rubiales también dirigió críticas al presidente Pedro Sánchez.

“Es curioso ver a estos tres políticos. El primero, el presidente del Gobierno, me pide que dé pasos. Cuando él ha dicho directamente a todos los electores que era ilegal hacer una amnistía”.

En referencia a la medida del Ejecutivo sobre los procesados del ‘procés’.

El exmandatario de la RFEF insistió en que su comportamiento “no fue un delito” y que ha sufrido un “linchamiento mediático sin precedentes”. También señaló que muchos medios “han manipulado” sus declaraciones y que su caída fue “una operación política para derribarle”.

La entrevista marca la primera aparición pública de Rubiales tras meses de silencio. Su regreso, lejos de apaciguar la polémica, ha vuelto a colocar el caso en el centro del debate social y político. Mientras las redes hierven y los partidos miden sus reacciones, Rubiales mantiene su versión: el beso a Jenni Hermoso fue “espontáneo, sin mala intención” y su persecución “una maniobra del poder”.