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Barco con pancarta que dice Free Palestine, varias personas a bordo y un collage con publicaciones de redes sociales y la foto de una persona enmarcada en un círculo rojo.
POLÍTICA

El Gobierno de Sánchez rescata a la flotilla asumiendo todos los gastos mientras un hombre del Puerto de Santa María fallecido sigue en Malasia

Manuel Jesús Ricardi Robles falleció cuando se encontraba de vacaciones en el país asiático

El Gobierno de Pedro Sánchez ha asumido todos los gastos del rescate de la flotilla española que fue evacuada desde Israel en las últimas horas. Ninguno de los participantes en el viaje tendrá que pagar el vuelo ni los costes de repatriación. El Ejecutivo justifica la medida como una “operación humanitaria”, amparada por la ley de asistencia consular en casos de emergencia.

Pero mientras tanto, una familia española vive un drama silencioso en el otro lado del mundo.

En Malasia, el cuerpo de Manuel Jesús Ricardi Robles, un hombre de 52 años natural del Puerto de Santa María (Cádiz), sigue sin poder ser repatriado por falta de recursos. Falleció el pasado 28 de septiembre, tras casi tres semanas ingresado en el hospital Sultanah Bahiyah, en la ciudad de Alor Setar.

Publicación en Facebook pidiendo ayuda urgente para repatriar a un familiar desde Malasia, mostrando una noticia en televisión sobre la recaudación de 7,000 euros para traer a un hermano fallecido, con imágenes de familiares afectados.

Manuel Jesús viajó al país asiático por vacaciones hace dos meses. Su estancia se alargó más de lo previsto. El 2 de septiembre fue hallado inconsciente en su habitación tras sufrir una neumonía severa y complicaciones cerebrales.

Estuvo entubado, con ventilación asistida y una traqueotomía. Pese a los esfuerzos médicos, falleció días después.

Ahora, su familia no puede costear los 7.000 euros necesarios para incinerar y repatriar sus cenizas. La cifra incluye la factura hospitalaria y los trámites internacionales.

Su hijo Jesús, de 27 años, viajó desde Tenerife para acompañarlo en sus últimos días. Pero continúa en Malasia intentando resolver el proceso sin ayuda suficiente.

“No podemos pagar tanto dinero. Solo queremos traerlo a casa”, explica la familia desde El Puerto. Su hermana Juana busca apoyo en España, mientras su sobrino permanece varado en Asia sin medios para mantenerse.

El contraste ha indignado a muchos ciudadanos.

Dos personas adultas sonrientes caminan por un pasillo iluminado, una de ellas aplaude mientras la otra avanza con expresión alegre, ambas visten ropa cómoda de color blanco y gris.

Mientras el Gobierno cubre todos los costes de los pasajeros de la flotilla, amparándose en razones humanitarias. Familias como la de Manuel Jesús deben mendigar ayuda para repatriar a un compatriota fallecido.

La familia ha solicitado auxilio al Gobierno español, a través de la Embajada en Kuala Lumpur y del Consulado Honorario, pero aún no han recibido una respuesta efectiva. “Pedimos al Estado que tenga el mismo trato humano con todos los españoles, no solo con algunos”, lamentan.

Manuel Jesús era hermano de Rafael Ricardi, el vecino de El Puerto injustamente encarcelado durante 13 años por un delito que no cometió. Aquella historia conmovió a toda España. Hoy, otra tragedia golpea a la misma familia, que vuelve a enfrentarse sola al abandono institucional.

Mientras la Administración se hace cargo del rescate de una flotilla completa, un español sigue esperando su último viaje de regreso. Su familia solo pide justicia y humanidad: que el Gobierno también los rescate a ellos.

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