España gana a Euskadi en pelota vasca y obliga a los separatistas a escuchar el himno

En el frontón Jai Alai de Gernika, la selección española femenina de cesta punta logró una victoria. Fue histórica frente a Euskadi, en un encuentro cargado de simbolismo político. La dupla española se impuso con claridad por 15‑4 y 15‑9.

Una vez cerrado el partido, se produjo un momento que marcó el pulso político del evento. Sonó el himno de España durante la entrega de medallas, surgieron pitos y abucheos en el público. Según testigos y medios locales, en un sector de la grada se escuchó una pitada sonora que intentó tapar la Marcha de Granaderos.

La reacción ha dividido interpretaciones. Desde el PP en el País Vasco calificaron el abucheo de “muestra de odio terrible”. Y un acto inaceptable hacia dos mujeres vizcaínas que defendían a España.

El presidente del PP vasco, Javier de Andrés, lamentó que las deportistas fueran silbadas mientras recogían su triunfo. Y acusó al entorno político del PNV y PSOE de fomentar un clima hostil.

En paralelo, el PNV trató de restar hierro al incidente. Su presidente, Aitor Esteban, calificó la jornada como un “modelo de respeto y convivencia”, considerando que la participación de Euskadi y España juntas refleja un alegato voluntario, no una imposición.

Sin embargo, el evidente contraste entre las palabras y la realidad del público añade tensión al discurso.

Lo que está claro es que en este primer enfrentamiento entre España y Euskadi, España se hizo con la victoria.

Sin embargo, los pitos y abucheos no han pasado desapercibidos. Las redes no han tardado en 'restregar' esa victoria tras ver la reación de los vascos más radicales y nacionalistas.

De esa reación tan deleznable con pitos y abucheos ha llegado la respuesta de muchos. La gran mayoría han criticado ese comportamiento, incluso vascos que no comparten esa ideología radical.