La multa de la DGT que más pica: hasta 200 euros por un gesto que haces cada día
Es una práctica que se suele hacer a diario, pero que en la mayoría de ocasiones está prohibida y te pueden sancionar
La DGT establece normas claras sobre cuándo se puede utilizar el claxon y en qué casos puede resultar en una multa. Tocar el claxon del coche es una acción que todos hemos realizado en algún momento, ya sea para advertir a otro conductor o simplemente para expresar frustración.
¿Cuándo se puede tocar el claxon?
La DGT explica que en la normativa vigente, recogida en el Reglamento General de Circulación, especifica que el uso del claxon está permitido únicamente en situaciones muy concretas. La principal función del claxon es alertar a otros usuarios de la vía sobre un peligro inminente o una situación potencialmente peligrosa. Aquí se detallan las circunstancias en las que es legal hacerlo sonar:
Advertencia de peligro: si existe un riesgo inmediato de accidente, tocar el claxon no solo está permitido, sino que es recomendable para evitar colisiones.
Adelantamientos en vías estrechas: cuando se trata de adelantar en una carretera estrecha o con muchas curvas, el uso del claxon puede alertar a los demás de tu presencia.
Paso a nivel: al adelantar a un vehículo de dos ruedas en un paso a nivel o cerca de uno. En este caso, tocar el claxon ayuda a advertir al otro usuario de tu maniobra.
Multas por uso indebido del claxon
El empleo del claxon fuera de las situaciones mencionadas puede resultar en sanciones económicas. Las multas por utilizar señales acústicas de forma indebida pueden oscilar entre 80 y 200 euros. Además, existen circunstancias específicas que pueden incrementar la cuantía de la multa:
Utilizar el claxon de manera exagerada, sin una causa justificada o en zonas donde su uso está explícitamente prohibido, puede resultar en sanciones severas.
Instalar señales acústicas no autorizadas, como las utilizadas por vehículos prioritarios (policía, bomberos, ambulancias), está penalizado con multas de hasta 200 euros.
Todos los vehículos a motor están obligados a tener instalado un dispositivo sonoro adecuado. No cumplir con esta normativa también puede ser motivo de multa.
¿Por qué se regula el uso del claxon?
La regulación sobre el uso del claxon tiene como objetivo principal reducir la contaminación acústica y promover el bienestar de la comunidad. Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el nivel de ruido tolerable para una buena salud auditiva es de 65 decibelios (dB). El sonido del claxon de un automóvil alcanza los 90 dB.
Este ruido, si se produce de manera constante y sin justificación, puede ser perjudicial para la salud tanto mental como física de las personas.
El claxon es una herramienta importante para la seguridad vial, pero su uso indebido puede generar molestias y sanciones. Conocer y respetar las normas establecidas por la DGT es fundamental para evitar multas y contribuir a un entorno más tranquilo y seguro para todos.
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