La discusión de Kiko Hernández y María Patiño que pone en peligro lo que más quieren
Kiko Hernández y María Patiño protagonizan una discusión en 'Ni que fuéramos shhh' que amenaza su amistad
En el programa Ni que fuéramos shhh del pasado martes tuvo lugar un momento bastante tenso entre Kiko Hernández y María Patiño. Una vez más, el tema en cuestión fue la comentada entrevista de Marta Riesco.
La relación entre la presentadora y el colaborador nunca ha sido tan cercana como lo es ahora. Hace ya muchos años que comparten una bonita amistad, pero el vínculo nunca ha sido tan íntimo como en la actualidad.
Y eso que ha habido situaciones que han hecho surgir muchas dudas sobre lo bien o mal que se llevan. Cuando Kiko se casó, hace ya unos meses, María Patiño no estuvo presente en el enlace. Un gesto que derivó a una multitud de especulaciones sobre su verdadera relación.
Sin embargo, parece que todo ha podido cambiar con el estreno de Ni que fuéramos shhh. En un primer momento Kiko no iba a ser parte del programa, pero hace unos días se estrenó como colaborador. En todo este tiempo, hemos podido ver que la relación entre ellos ha cambiado hasta el punto de que ahora son inseparables.
El enfrentamiento entre Kiko Hernández y María Patiño que amenaza su amistad
A pesar de todo, en el programa del pasado martes tuvieron una discusión que hizo saltar todas las alarmas. Después de aquel momento, varias personas se han preguntado si no es posible que exista algún tipo de mal rollo entre ellos.
Todo comenzó en un debate que surgió a raíz de unas declaraciones de Marta Riesco. En enllas, reconocía que tenía buena relación con Rocío Flores, unas palabras que pronunció hace ya más de año y medio.
Todos los tertulianos llegaron a la conclusión de que estas declaraciones no eran ciertas. Sin embargo, Kiko Hernández defendió, que en aquel momento, tenía que decir eso porque "estaba enamorada hasta las trancas de Antonio David".
Sin embargo, esta opinión no gustó nada a María Patiño. La presentadora cree que no es necesario exagerar la situación, tal y como cree que lo hizo Marta Riesco en su momento. De hecho, aseguró que ella misma está "enamorada" y no actuaría así en esta situación.
Justo después, la presentadora elevó el tono para asegurar que nadie de esa mesa haría eso en un contexto similar. Además, hizo una escenificación de las declaraciones de Marta Riesco con un tono de sorna.
Kiko siguió manteniendo su postura, argumentando que está intentando entenderla. Que en ese momento estaba in love con Antonio David, motivo por el que escogió no hablar mal de su hija.
El colaborador comentó que "parte de la ruptura ha sido por culpa de la hija", tal y como ella reveló en una reciente entrevista. Sin embargo, Kiko aseguró que "aun así no habló mal de ella".
Inmediatamente después María Patiño estalló. "Por favor, Kiko, está contando lo mismo que contó Rocío", dijo vociferando. La presentadora quiso dejar claro que el papel de los hijos nunca puede interferir en la ruptura de la relación de los padres.
Una exposición de lo más tensa, pues dio varios fuertes golpes con la palma de su mano sobre la mesa del plató. Un gesto con la intención de sentenciar lo que estaba contando.
Ante esto, Kiko Hernández se quedó algo confundido. Quería intervenir, pero acabó reculando. "Es que no quiero hablar, porque luego pasa lo que pasa", manifestó.
Estas palabras dejaron muchas dudas sobre a lo que se refería. Es una obviedad de que temía una reacción a su alegato, motivo por el que decidió guardar silencio. En definitiva, una situación incómoda que no hace más que empeorar la imagen sobre la amistad que, supuestamente, se profesan.
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