Detenido en París un inmigrante por agredir a una mujer de 67 años para intentar violarla

Un hombre de 27 años, de origen tunecino y en situación irregular, fue arrestado en París. Supuestamente, tras un intento de agresión sexual a una mujer en plena calle el pasado 5 de octubre, cerca de la estación del Norte.

Las autoridades informaron que el sospechoso estaba bajo la influencia del alcohol cuando ocurrieron los hechos. Dos días después, fue formalmente imputado y puesto en prisión preventiva, enfrentando cargos por tentativa de violación y robo con violencia.

Tras asistir a una boda, la mujer se dirigía a su domicilio, pero al llegar a la estación se sintió desorientada y comenzó a pedir ayuda a quienes pasaban por allí.

Entre los transeúntes se encontraba el presunto agresor, que se ofreció a guiarla. No obstante, cuando ambos llegaron a la calle de Alsacia, su comportamiento cambió. Supuestamente,  la sujetó del cabello, la golpeó en el rostro y la derribó al suelo.

El hombre trató de quitarle la ropa mientras se bajaba los pantalones, lo que provocó que la mujer, aterrorizada, comenzara a gritar pidiendo ayuda. Sus gritos llamaron la atención de un matrimonio que pasaba por la zona, quienes no dudaron en intervenir para poner fin al ataque.

Minutos después, la policía llegó al lugar y trasladó al sospechoso a la sede del segundo distrito de la Policía Judicial, donde quedó bajo custodia para ser interrogado.

En su declaración, el hombre aseguró no recordar los hechos, atribuyéndolos al consumo de alcohol. No obstante, los testigos aseguraron que sus acciones tenían una intención sexual evidente y que solo la rápida intervención de los transeúntes impidió que la agresión se consumara.

La víctima fue hospitalizada por diversas contusiones y recibió un parte médico que le otorgó cinco días de incapacidad temporal. Por el momento, el hombre continúa en prisión preventiva, a la espera de ser juzgado por los cargos de tentativa de violación y robo.

Y es que, una vez legaron los testigos, el presunto atacante salió huyendo del lugar. No sin antes arrancar el reloj de la víctima de su muñeca.