
El histórico balneario de El Molar, lleva okupado por una familia desde hace 20 años
Actualmente, la familia rumana reside en el balneario y se niega a abandonar las instalaciones, complicando los planes municipales
El histórico balneario Fuente del Toro, en El Molar, lleva ocupado por una familia con tres menores desde hace 20 años. El Ayuntamiento del Molar busca recuperar la finca, símbolo del municipio, y cuyo uso medicinal alcanzó a Isabel II y otras personalidades.
Construido en 1846, el balneario quedó arrasado tras la Guerra Civil y fue reconstruido en décadas posteriores por sus propietarios. A pesar de la reconstrucción, los dueños abandonaron las edificaciones, dejando que la finca quedara desocupada y deteriorada.
Actualmente, la familia rumana reside en el balneario y se niega a abandonar las instalaciones, complicando los planes municipales. El balneario cuenta con un manantial de aguas medicinales, que durante décadas atrajo a visitantes en busca de tratamientos curativos.

Con los años, el balneario se convirtió en un referente histórico, vinculado a la realeza y a múltiples figuras ilustres del país. El Ayuntamiento insiste en que recuperar la propiedad es prioritario, tanto por su valor histórico como por la seguridad de los menores.
Se han iniciado gestiones legales para desalojar a los ocupantes, aunque los procedimientos se han prolongado debido a la situación familiar.
El balneario incluye varias edificaciones dentro de la finca, construidas tras la Guerra Civil, que actualmente se encuentran deterioradas. El inmueble se ha convertido en un símbolo de la dificultad para proteger el patrimonio histórico frente a ocupaciones prolongadas.

Las autoridades locales destacan que el balneario podría recuperarse para fines turísticos y culturales, respetando su valor histórico original. Vecinos del Molar muestran preocupación por la situación y apoyan la iniciativa del Ayuntamiento para recuperar la finca histórica.
La familia que ocupa el balneario ha resistido los intentos de desalojo durante décadas, creando un conflicto prolongado y mediático.
El Ayuntamiento plantea alternativas para reubicar a los ocupantes y restaurar el balneario, equilibrando patrimonio y derechos familiares. Los expertos en patrimonio consideran que la recuperación de Fuente del Toro es esencial para mantener viva la historia del municipio. El balneario, que llegó a curar con sus aguas medicinales a la realeza, se enfrenta hoy a un futuro incierto por la ocupación ilegal.
El manantial y las instalaciones podrían volver a abrirse al público, según los planes municipales, si se logra resolver la situación legal.
La finca se encuentra en una ubicación estratégica del Molar, rodeada de naturaleza, que realza su valor histórico y cultural para el municipio.
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