Estos son los dos socialistas que recibieron 300.000 euros de un banquero de Andorra

El PSOE sigue causando controversia. Esta vez, la controversia nace de Higini Cierco, uno de los antiguos dueños de la Banca Privada de Andorra. 

Según ha publicado El Confidencial, Cierco pagó al menos 300.000 euros a dos piezas clave en la operación del PSOE contra jueces, fiscales y periodistas. El hombre consiguió, según el medio, pagar ese dineral a P.L.L., una periodista supuestamente involucrada en dicha operación. 

Por otro lado, según el diario, aparece otro socialista que parte de ese dinero ha acabado en la cuenta bancaria de otro socialista: J.P.D., empresario socialista supuestamente involucrado en la operación.

Estos pagos fueron confirmados por el propio Cierco, según informa el medio. Entre 2022 y 2023, se realizaron varias transferencias por un total de 300.000 euros. Así lo confirma el citado diario.

Una acción desde una cuenta a nombre de la persona en la entidad Morabanc hacia un depósito en el que P.L.L. figura como única titular.

Supuestamente, la periodista, que desde 2021 dirige un medio de comunicación, transfirió 100.000 euros a la cuenta de una sociedad mercantil administrada por J.P.D. Este último, según el medio, actualmente está siendo investigado por la Audiencia Nacional por fraude en subvenciones públicas y blanqueo de capitales.

Según el medio citado, en los últimos meses, J.P.D. ha ofrecido a empresarios, abogados e imputados en casos de corrupción una parte de la indemnización que la BPA está reclamando en España y Andorra. 

Siempre que aportaran pruebas que demostraran que la intervención en la entidad fue irregular o que el PSOE está siendo víctima de una conspiración organizada por el PP. Esto con el apoyo de jueces, medios de comunicación y organizaciones como Manos Limpias.

La periodista P.L.L., quien dirige un diario digital, podría también ha trabajado estrechamente con Santos Cerdán. Lo hizo en la planificación de la campaña de Ferraz contra jueces, fiscales, periodistas y dirigentes de la oposición.

Supuestamente, el propósito no se limita a desacreditar a los profesionales y sectores que Moncloa ha puesto en su objetivo. También generar nuevos escándalos que sirvan para desviar la atención de las redes de corrupción que ponen en aprietos a Sánchez.