El duro golpe de Lambán y García Page que deja KO a Pedro Sánchez
El gesto de García Page y Lambán puede interpretarse como un recordatorio de las tensiones latentes en el PSOE
Pedro Sánchez, actual secretario general del PSOE, se prepara para ser ratificado en su cargo en el 41º Congreso del partido, que se celebrará en noviembre en Sevilla. A pesar de haber obtenido los avales necesarios para optar a la reelección, un inesperado golpe ha surgido dentro de las filas socialistas. Dos de los presidentes autonómicos más influyentes del partido, Emiliano García-Page y Javier Lambán, han decidido no otorgar su apoyo al líder socialista.
Ambos han mantenido una relación tensa con Sánchez en los últimos años, especialmente en lo relacionado con la dirección y políticas internas del partido. La negativa de estos dos pesos pesados del PSOE a avalar a Sánchez para su reelección como secretario general ha sido vista por algunos como un desafío directo a su liderazgo. Justo cuando el partido intenta unificarse de cara al próximo congreso.
Una reelección asegurada, pero con fisuras internas
A pesar del gesto de García Page y Lambán, Pedro Sánchez ha logrado los avales necesarios para optar a la reelección. Según el reglamento del PSOE, el secretario general debe presentar un número de avales equivalente al 6% del censo.
Algo que Sánchez ha conseguido sin mayores problemas. No obstante, el hecho de que dos de los principales líderes autonómicos no hayan dado su aval resalta las divisiones internas.
García Page, conocido por su posición crítica hacia algunas de las decisiones del Gobierno de Sánchez, ha evitado participar en procesos de primarias anteriores en los que Sánchez ha sido candidato.
Esta postura no sorprende del todo, pero sí confirma el distanciamiento entre ambos líderes. Por otro lado, Lambán, quien también ha sido crítico con la estrategia de Sánchez. No ha explicado públicamente los motivos de su decisión, lo que añade una capa de incertidumbre al contexto interno del PSOE.
Tensiones entre socialistas y la dirección del partido
El gesto de García Page y Lambán puede interpretarse como un recordatorio de las tensiones latentes entre algunos sectores del PSOE. Ambos presidentes autonómicos representan a dos de las comunidades más importantes en términos de apoyo socialista. Sus críticas hacia Sánchez se han hecho evidentes en más de una ocasión, especialmente en lo relacionado con la gestión de la política territorial y las alianzas con partidos independentistas.
La negativa de estos dos líderes a respaldar a Sánchez en su reelección refuerza la idea de que el PSOE, aunque aparentemente unido. Sigue teniendo fisuras internas que podrían complicar su estabilidad a largo plazo. Aunque Sánchez ha consolidado su liderazgo a nivel nacional, algunos barones regionales siguen mostrando resistencia a su estilo de gobernar y a las decisiones estratégicas que ha tomado en su mandato.
Más noticias: