
Así intenta blanquear la televisión catalana las agresiones de los inmigrantes en Salt
La televisión pública catalana blanquea las dos noches de disturbios con enfrentamientos y destrozos en Salt
La localidad de Salt, cercana a Girona, ha sido escenario de dos noches consecutivas de violentos disturbios. Estos, marcados por la quema de contenedores, daños en la vía pública y ataques directos a la policía.
Entre los incidentes más graves, se registró un intento de asalto a la comisaría de los Mossos d'Esquadra. Lo que obligó a las fuerzas de seguridad a utilizar lanzadoras de foam para dispersar a los manifestantes.
Las violentas agresiones en Salt se han originado tras el desalojo de un imán de una mezquita de la localidad, el que estaba okupando una vivienda. Por esto, desde la cuenta de 324cat han atribuido los disturbios a los "desahucios", legitimando de manera absurda la ilegalidad.

Ante la posibilidad de que los altercados continúen este miércoles, la policía catalana ha diseñado un dispositivo de seguridad reforzado. Esto, con la presencia de la Brigada Móvil (Brimo), para contener nuevos brotes de violencia.
Hasta el momento, se han producido seis detenciones y un agente de los Mossos ha resultado herido tras recibir el impacto de una piedra en un vehículo patrulla.

El desalojo de una vivienda ocupada, origen de los disturbios
El detonante de los enfrentamientos fue el desalojo de una vivienda ocupada en la avenida de los Països Catalans, propiedad de una entidad bancaria. El pasado lunes por la noche, tres hombres, entre ellos el imán de una de las mezquitas de la localidad, intentaron volver a ocupar el inmueble. La activación de la alarma alertó a los Mossos d'Esquadra, quienes intervinieron y desalojaron a los ocupantes, denunciándolos por el intento de ocupación.
Aunque la salida se produjo sin incidentes dentro del edificio, en el exterior se congregó un grupo de personas que increparon a los agentes y generaron disturbios. Situación que obligó a la policía a intervenir. Posteriormente, alrededor de un centenar de personas se dirigieron a la comisaría de los Mossos, donde lanzaron piedras y huevos contra las instalaciones, intensificando la tensión en la zona.
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