
El árabe se afianza en Cataluña 122 colegios imparten clases financiadas por Marruecos
Barcelona lidera la lista con 61 centros, seguida de Tarragona con 19, Girona con 15 y Lleida con 11
El Gobierno catalán sigue adelante con la implantación del Programa de Lengua Árabe y Cultura Marroquí (PLACM) en 122 centros educativos durante el curso 2024-2025. Esta iniciativa, financiada por Marruecos y promovida por la Generalitat, ha generado un intenso debate y críticas desde distintos sectores sociales. Que alertan del impacto que puede tener en la integración de los alumnos y en la cohesión social en Cataluña.
Según los datos del Departament d'Educació, solo cuatro centros imparten estas clases dentro del horario lectivo. Mientras que los otros 118 las incluyen como actividad extraescolar. Aunque el porcentaje de centros participantes es del 2,27% del total, su presencia es significativa en algunas zonas con alta población de origen marroquí.
Por provincias, Barcelona lidera la lista con 61 centros, seguida de Tarragona con 19, Girona con 15 y Lleida con 11. En ciudades como Lleida, Barcelona, Tarragona, Sabadell y Terrassa, la concentración de colegios que ofrecen el programa es notable.

Como ha publicado La Razón, la iniciativa del PLACM se enmarca dentro de un acuerdo entre el Gobierno de España y Marruecos. Que permite la enseñanza del árabe y la cultura marroquí a alumnos de origen magrebí.
Sin embargo, a pesar de estar coordinado por el Ministerio de Educación español, los docentes son seleccionados y financiados por la Fundación Hassan II, dependiente del Gobierno marroquí. Esto ha despertado suspicacias sobre el tipo de contenido que se imparte y los valores que se transmiten en las aulas.
Críticas al programa: "Una estrategia de injerencia extranjera"
Desde sectores críticos, se acusa a la Generalitat de ceder ante presiones externas y de promover un modelo educativo que refuerza la separación en lugar de la integración. Vox, partido que ha solicitado datos sobre el programa, ha llevado el debate al Parlament de Cataluña, denunciando que esta política "socava la cultura nacional y fragmenta la sociedad catalana".

"Es inaceptable que un gobierno extranjero financie la educación de nuestros jóvenes y decida quién enseña en nuestros colegios", han criticado desde Vox, que ha solicitado la eliminación inmediata del PLACM. "En lugar de fomentar el aprendizaje del catalán y el castellano, la Generalitat prioriza un modelo que refuerza las diferencias culturales y dificulta la integración".
Otras voces también han advertido de los riesgos de que un país con un marcado perfil islámico tenga injerencia en la formación de menores dentro de la enseñanza pública española. "Nos encontramos con un adoctrinamiento encubierto que se disfraza de multiculturalismo", han alertado desde diversas asociaciones en defensa de la unidad cultural española.
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