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Varias personas participan en una manifestación pacífica en la calle sosteniendo carteles con mensajes en contra de la violencia y la delincuencia, promoviendo la convivencia y la responsabilidad colectiva.
OPINIÓN

Torre Pacheco: el grito de una España que se resiste a morir

La opinión de Javier García Isac de hoy, lunes 14 de julio de 2025

Los últimos y gravísimos incidentes en Torre Pacheco no son un hecho aislado ni una anécdota local. Son la enésima señal de alarma de una España que se desangra a manos de una inmigración ilegal descontrolada, promovida y consentida por una izquierda traidora y una derecha cobarde. Ya no valen paños calientes. Lo de Torre Pacheco es el reflejo de lo que está sucediendo, día sí y día también, en miles de barrios de toda nuestra geografía: violencia, inseguridad, ocupaciones, agresiones sexuales, tráfico de drogas, mafias, y una creciente sensación de que el Estado ha dejado de estar del lado de los españoles.

Ya no es cuestión de matices ideológicos. Es una cuestión de supervivencia nacional. O recuperamos el control de nuestras calles, o seremos expulsados de ellas por quienes, con total impunidad, las están tomando por la fuerza. Y no lo hacen solos: lo hacen con la complicidad del PSOE y del PP, que han convertido a España en una colonia de intereses globalistas, donde los derechos de los nacionales valen menos que los de quienes asaltan nuestras fronteras con total desprecio por nuestra legalidad y nuestras costumbres.

La mentira del “buenismo” y la traición institucional

Nos han vendido durante años la mentira del “buenismo”, esa patraña ideológica que dice que todo el que entra en España es automáticamente una víctima, alguien que debemos acoger, mantener, e incluso premiar por el simple hecho de llegar. Pero la realidad —como se ha visto de nuevo en Torre Pacheco— es que estamos importando delincuencia, violencia y odio hacia lo español.

¿Dónde está la izquierda cuando los vecinos denuncian el miedo que sufren a diario? ¿Dónde están los progresistas de salón que se rasgan las vestiduras por un comentario en redes pero callan cuando un español es apuñalado, agredido o robado por un ilegal? Están callados, porque para ellos el enemigo no es el que viola o trafica, sino el español que se atreve a denunciarlo.

Y no podemos dejar de señalar también al Partido Popular, esa derecha acomplejada que en muchos casos gestiona los centros de menas, acepta el reparto de inmigrantes ilegales impuesto por Bruselas, y luego simula una indignación fingida para no perder el voto de los que todavía creen que el PP puede defender algo más que su sueldo institucional.

¿Qué ha pasado en Torre Pacheco?

Lo ocurrido en Torre Pacheco es el resultado de años de desidia, complicidad y traición institucional. Una vez más, jóvenes extranjeros, muchos de ellos presuntamente menores, han sembrado el caos en las calles. La policía, completamente desbordada y maniatada por unas leyes absurdas y por el miedo a ser acusada de racismo, apenas puede contener el desorden. Y los vecinos, hartos de vivir entre sirenas y machetes, comienzan a organizarse, a levantar la voz, a decir basta.

La pregunta no es qué ha pasado. La pregunta es: ¿cuánto tiempo más vamos a tolerarlo?

Hay que cerrar los centros de menas

No se puede seguir manteniendo esta ficción perversa. Muchos de estos supuestos menores ni son menores, ni vienen solos, ni buscan una vida mejor. Vienen con las instrucciones claras de organizaciones que operan impunemente dentro y fuera de España: ocupar, delinquir y sembrar el caos. Los centros de menas son un fracaso y un peligro. Hay que desmantelarlos de inmediato. Y si realmente son menores, deben ser repatriados con sus padres y a sus países de origen. España no es ni un orfanato ni un albergue internacional.

VOX ya lo advirtió, y tenía razón

Hace un año, VOX salió de los gobiernos autonómicos por el reparto de inmigrantes ilegales. Muchos no lo entendieron entonces. Hoy lo comprenden todos. No se puede gobernar con quienes prefieren obedecer a Bruselas antes que proteger a sus propios vecinos. VOX no será cómplice de esta invasión demográfica, ni de las políticas criminales que están llenando nuestras calles de miedo y nuestras escuelas de inseguridad.

VOX es la única formación que habla claro y actúa en consecuencia. Mientras otros callan, pactan o miran hacia otro lado, ellos exigen expulsiones inmediatas, cierre de fronteras, control de entradas y protección total a los españoles.

No hay paz sin orden. No hay orden sin ley. No hay ley sin soberanía.

España ha dejado de ser una nación soberana. Hoy la gobiernan burócratas, ONGs, mafias, corruptos y traidores. El Estado, que debería defender a sus ciudadanos, ha declarado la guerra a la nación. Persigue al que piensa, reprime al que denuncia y premia al que delinque.

Es hora de decir basta.

Torre Pacheco debe marcar un antes y un después.

Debemos elegir: o estamos con los españoles, o estamos con quienes quieren exterminarlos cultural, económica y socialmente. O defendemos la vida, la propiedad y la libertad, o nos convertiremos en extraños en nuestra propia patria.

¡Recuperemos la paz y la seguridad en nuestros barrios!

¡Cuidemos a nuestros mayores, protejamos a nuestras mujeres, defendamos a nuestros hijos!

Y sobre todo, no permitamos nunca más que nos tilden de racistas por defender nuestro derecho a vivir en paz.

España o la inmigración ilegal.

Tú eliges.

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