Ni Arda Güler ni Endrick: la primera venta del Madrid ya está decidida, se va en enero
Carlos Ancelotti no está convencido con su juego y sabe que no va a contar con él para nada
Hay un aspecto que caracteriza al Real Madrid por encima de otros clubes y es la absoluta excelencia. Si no se está dando lo que se espera de él tiene todas las papeletas para salir de Chamartín. Esto lo hemos podido ver con nombres como Luka Jović, Robinho o Illarramendi que no han podido adaptarse.
Siete años después sigue sin adaptarse
Casos como los anteriores ocurren prácticamente cada temporada cuando el Real Madrid se ve obligado a deshacerse de él en su plantilla. Esta temporada no iba a ser menos, ya que hay un nombre que parece que no va a formar parte de la plantilla en próximamente. Su nombre es Dani Ceballos, que llegó al Real Madrid en 2017 tras cuajar unas buenas temporadas en el Betis.
Siete años después de su llegada, ha pasado por la Premier donde parecía que había recuperado su mejor versión. Sin embargo, esto no fue más que un espejismo en el que formó parte de un gran Arsenal bajo los mandos de Mikel Arteta. Parece que se va está preparado para formar parte de un club con menos exigencia.
Ni Arda Güler ni Endrick: la primera venta del Madrid ya está decidida, se va en enero
La competitividad que hay en el Real Madrid por un hueco en el once es demasiado alta, debido al nivel de las estrellas madridistas. La llegada de Mbappé supone que Bellingham tenga que retrasar su posición y haya un hueco menos en el centro del campo. Arda Güler y Endrick, por ejemplo, se han quedado sin miuntos, y Dani Ceballos también.
Todo parece indicar que Dani Ceballos se marchará del Real Madrid, e incluso tiene un rumbo fijo. Sería dirección a Sevilla para volver a jugar con el Betis, con el que tan buenos recuerdos tiene. Su fichaje se cerraría en torno a los 20 millones de euros que tendrían que pagar los verdiblancos.
Este traspaso liberaría un hueco en el Madrid y daría la oportunidad a Dani Ceballos de sentirse importante en el Betis. Además, podría significar más minutos para Arda Güler, por ejemplo, que parece que tiene mucho por hacer. Sea como sea, es evidente que se producirán cambios en el vestuario blanco durante el próximo verano.
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