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Montaje de fotos de Charlene y Alberto de Mónaco, y, en primer plano, la princesa Gabriella de Mónaco.
CORAZÓN

Gabriella, hija de Alberto de Mónaco y Charlene, confirma los rumores: lo ha hecho

Gabriella de Mónaco deja a todos boquiabiertos con un inesperado gesto que marca un hito en su vida pública

Este miércoles, una vez más, los Grimaldi demostraron cumplen con estar presentes en eventos de gran relevancia. Los príncipes Alberto y Charlene, como figuras centrales de la monarquía monegasca, continúan acompañando a sus hijos en momentos significativos de sus vidas. A pesar de sus responsabilidades, se muestran siempre cercanos y disponibles para compartir experiencias con ellos.

En esta ocasión, la atención se centró especialmente en uno de los miembros más jóvenes de la familia. Gabriella de Mónaco, la princesa, es vivió una experiencia que marca una etapa en su vida. A sus diez años, la pequeña princesa ha dejado atrás su etapa traviesa para dar paso a una niña más reservada y prudente. 

Una niña entrega un ramo de flores a una mujer rubia elegantemente vestida mientras otras dos personas observan sonrientes sobre una alfombra roja en un entorno formal

El primer discurso de Gabriella en público

En su visita a la región de Carladès, Gabriella de Mónaco, la hija de los príncipes Alberto y Charlene, vivió un momento muy especial. Gabriella asumió su título de condesa de una manera tranquila, aunque visiblemente tímida. Este fue un gran día por el homenaje a Gabriella y, también, por el paso hacia una nueva etapa en su vida como miembro de la familia real.

Al tomar el micrófono frente al público, la pequeña princesa mostró algo de vergüenza. Pero fue valiente al pronunciar sus primeras palabras en público: "Bonjour, merci Carladès" (Buenos días, muchas gracias Carladès).

Este fue un momento de gran relevancia para Gabriella y para sus padres, quienes estuvieron muy pendientes de su bienestar. Charlene, en su papel de madre, la observaba con ternura, asegurándose de que su hija se sintiera cómoda en todo momento. Gabriella, al terminar su discurso, no dudó en lanzar un beso al público, gesto que fue respondido con aplausos. 

Una familia de cuatro personas, que son Alberto de Mónaco, Charlene, y sus dos hijos, posa al aire libre frente a un castillo y un paisaje verde.

Un homenaje especial y un look que enamoró

En reconocimiento a su título de condesa de Carladès, Gabriella fue homenajeada con una plaza dedicada a su nombre: la Plaza Princesa Gabriella. Además, durante su visita, recibió la llave de la ciudad de Vic-sur-Cère, antigua capital del condado. Esta región tiene un vínculo histórico con la Casa de Grimaldi desde el siglo XVII, cuando el rey Luis XIII de Francia otorgó el título a Honoré II de Mónaco.

Gabriella lució un vestido floral de Dolce & Gabbana que la hizo resaltar en la ocasión. Confeccionado en seda, el vestido tenía detalles de tirantes drapeados y una falda midi con mucho vuelo, perfecto para la joven princesa. Charlene, por su parte, eligió un elegante diseño de Zimmermann en color marfil con detalles florales, que combinó con sandalias de Michael Kors.

Este evento marcó una transición importante en la vida de Gabriella, quien sigue creciendo como parte fundamental de la familia real monegasca. Aunque la niña se mostró tímida, su comportamiento sereno demuestra que está aprendiendo su rol con dignidad. La Plaza Princesa Gabriella es solo uno de los muchos homenajes que marcarán su legado.

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