Giro inesperado en BBVA con sus tarjetas: muchos ya saben que todo va a cambiar

Algo ha cambiado en BBVA. Lo que antes era impensable para millones de usuarios de tarjetas, ahora es posible con un simple toque en el móvil. Y es que, tras años con diseños idénticos, por fin llega una opción que pone la creatividad del cliente en el centro.

Durante décadas, las tarjetas bancarias han sido iguales para todos: frías, genéricas, sin alma. Pero ahora, BBVA ha lanzado una innovación que rompe con esa tradición. Y lo hace de la mano de Apple y Visa, en un movimiento que promete cambiar la forma en la que nos relacionamos con nuestras tarjetas.

Las tarjetas de BBVA ahora son 100 % personalizables

BBVA ha activado en su aplicación móvil una nueva funcionalidad de personalización de tarjetas. Está disponible desde ya para usuarios de iPhone 15 Pro o versiones posteriores.

En esta primera fase, está limitada a tarjetas virtuales Visa. Pero la entidad ha confirmado que también llegará pronto a las tarjetas físicas.

Esta posibilidad de diseño personalizado se basa en la tecnología Image Playground, integrada en los sistemas de Apple Intelligence. Los clientes pueden elegir una imagen de su galería, o describir la imagen que desean ver. El sistema genera varias propuestas visuales y el usuario puede escoger la que más le guste.

Una vez confirmada, la tarjeta se actualiza al instante en el wallet digital de la app de BBVA, sin necesidad de esperar ni hacer pasos complicados. Todo el proceso es rápido, intuitivo y totalmente seguro. Cumpliendo con los más altos estándares de privacidad y protección de datos.

Así funciona el nuevo sistema de diseño de tarjetas

Para empezar a personalizar, basta con acceder a la app de BBVA y entrar en la sección de tarjetas. Una vez ahí, seleccionar la tarjeta Visa virtual que se desea modificar y activar la función de diseño. Desde ahí, el cliente puede subir su propia imagen o dejar que el sistema de Apple genere una desde cero con una descripción de texto.

Las imágenes pueden editarse, combinarse o sustituirse tantas veces como se quiera, siempre que se respeten ciertas condiciones. El contenido no puede infringir derechos de autor ni incluir imágenes ofensivas o sensibles.

Según ha indicado el propio banco, se trata de una función pensada para que cada usuario pueda dar un toque personal a su tarjeta. Reflejando sus gustos, valores o estilo de vida.

Desde Visa han destacado que esta novedad es parte del camino de innovación que mantienen junto a BBVA desde hace más de 50 años. Tras los pagos contactless y las tarjetas digitales, ahora el foco está en la personalización. Ya no se trata solo de pagar, sino de cómo se paga, y con qué imagen se representa el cliente.

Por su parte, Javier López Chicote, responsable de innovación, ha explicado que esta iniciativa responde al deseo de poner al cliente en el centro. Se le da más control sobre su experiencia digital.

Y lo mejor está por venir: BBVA ya trabaja para extender esta personalización a tarjetas físicas. Podrán diseñarse desde la app y recibirse directamente en el domicilio del cliente.