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Una mujer sonriente con billetes de euro frente a un paisaje urbano con un río y un puente.
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El billete español con el que te puedes pagar tu próxima escapada de lujo

Un billete de 1.000 pesetas del siglo XIX ha sorprendido por su elevado valor en subastas

El billete de 1.000 pesetas del Conde de Cabarrús ha captado nuevamente la atención en el mundo de la numismática. Con su valor disparándose en subastas y siendo objeto de gran interés entre coleccionistas.

Este histórico billete, emitido a finales del siglo XIX, ha pasado a formar parte del grupo de piezas únicas. Y es que, dependiendo de su estado de conservación y la casa de subastas, puede alcanzar cifras asombrosas. 

El billete del Conde de Cabarrús: un tesoro del siglo XIX

El billete de 1.000 pesetas fue emitido en mayo de 1895, y su anverso destaca por mostrar el retrato de Francisco Cabarrús. Este personaje histórico no es cualquier figura: fue un político y economista de gran importancia, quien, además de ser ministro de Hacienda de España, ocupó el puesto de tesorero de Napoleón.

Además del retrato de Cabarrús, el anverso incluye otros elementos clave como el caduceo de Mercurio. Se trata del símbolo clásico de los comerciantes, y la inscripción del Banco de España.

Billete antiguo de mil pesetas emitido por el Banco de España en 1895.

Concretamente, la leyenda reza: "EL BANCO DE ESPAÑA PAGARÁ AL PORTADOR MIL PESETAS", acompañado por la fecha de emisión. Y otros detalles, como las firmas de los altos cargos del banco, y distintos elementos que resaltan el valor histórico de esta pieza.

En el reverso del billete, se muestra la imagen del rey Carlos III, flanqueada por una Cornucopia y un león reclinado. En esta parte también se lee "BANCO DE ESPAÑA MIL PESETAS".

Se trata de un recordatorio del valor que este billete tuvo en su momento. A todo esto se le suma la marca de agua, que incorpora una cabeza de Apolo. Y el número 1.000 como referencia de su valor facial.

Un objeto de lujo en el mercado numismático

A pesar de que este billete fue emitido hace más de un siglo, su relevancia no ha disminuido. También ha crecido con el paso del tiempo, a medida que han pasado los años.

Los coleccionistas, particularmente aquellos que se especializan en monedas y billetes antiguos, ven en él una pieza valiosa no solo por su rareza, sino también por su historia. No es sorprendente que muchos estén dispuestos a pagar miles de euros para tenerlo en su colección.

El tamaño del billete también lo distingue de otros emitidos en épocas posteriores. Con unas medidas de 168 por 105 milímetros, es un billete de dimensiones relativamente grandes en comparación con los estándares actuales. Su tamaño, junto con la calidad del papel y el detalle de las ilustraciones, contribuyen a su elevado valor en el mercado.

Billete antiguo de 1000 pesetas emitido por el Banco de España con un diseño detallado que incluye un busto en el centro y un león acostado en la parte inferior derecha.

Una pieza para coleccionistas exigentes

Este billete de 1.000 pesetas no es solo una reliquia del pasado. También es un objeto de deseo para coleccionistas que buscan piezas únicas con gran valor histórico. Su conexión con figuras como Francisco Cabarrús, Carlos III, y la época del reinado de Alfonso XIII, lo convierten en una pieza única.

Los coleccionistas más apasionados saben que encontrar este tipo de billetes en perfecto estado es una rareza, lo que solo aumenta su atractivo y, por ende, su valor. Para muchos, poseer este billete es mucho más que tener una pieza de papel moneda, es tener un fragmento de historia en sus manos.

¿Dónde adquirir este billete?

Para aquellos interesados en hacerse con esta joya, las casas de subastas especializadas en numismática son el lugar ideal para comenzar la búsqueda. Las plataformas online como bid inside y Aureo & Calicó suelen ofrecer oportunidades para adquirir estos billetes.

Sin embargo, para los que simplemente desean tener una reproducción o gastar una broma, eBay ofrece una alternativa más accesible en forma de facsímiles. Estas copias, aunque sin valor económico real, permiten a los curiosos admirar de cerca el diseño de uno de los billetes más codiciados del mercado.

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