
Anuncio urgente de BBVA y Banco Santander sobre los cajeros: será en unas pocas horas
BBVA y Santander comunican a sus clientes que a partir de este 28 de junio habrá unas cuantas novedades
Tanto BBVA como Banco Santander han lanzado un mensaje urgente a sus clientes. A partir del 28 de junio, entrará en vigor una nueva ley que obligará a todos los bancos a realizar importantes actualizaciones en sus cajeros automáticos.
Esta normativa tiene como objetivo mejorar el acceso de las personas con discapacidad. Facilitará así el uso de los terminales bancarios a toda la población sin importar su condición física, sensorial o intelectual.
Con esta nueva normativa, sacar dinero o realizar operaciones básicas como consultar el saldo o hacer transferencias será más sencillo para muchos. Y no solo para quienes tienen alguna discapacidad. Los cambios también están pensados para mejorar la experiencia general del usuario, incluyendo a personas mayores o a quienes tienen dificultades visuales.

Los cambios que esperan en BBVA y Banco Santander
Los cambios se notarán progresivamente en los cajeros de BBVA, Banco Santander y el resto de entidades. Se estima que en cuestión de horas después de la entrada en vigor de la ley, comenzarán las actualizaciones técnicas.
Entre las novedades más destacadas se encuentran el aumento del tamaño de letra, la incorporación de audioguías, mejoras en el brillo de la pantalla. Pero también una interfaz más intuitiva y fácil de entender. Además se incluirán botones con relieve y conexiones para auriculares, permitiendo seguir instrucciones por voz.
Este cambio no solo afecta al exterior de los cajeros. La ley también exige que el personal de las entidades reciba formación específica para poder atender adecuadamente a personas de diversidad funcional. Además, se deberán ofrecer distintos canales de atención accesibles para asegurar una experiencia sin barreras.
Se incorporarán de forma progresiva
Según la normativa, los nuevos cajeros deberán cumplir inmediatamente con estos requisitos. En cuanto a los que ya están en funcionamiento antes del 28 de junio de 2025, podrán seguir operando hasta completar su vida útil. Eso sí, no podrá superar los 10 años.

Esto significa que la transformación será gradual. No obstante, las entidades tienen la obligación de informar claramente a sus clientes sobre cuáles terminales ya están adaptados.
En España hay actualmente cerca de 47.000 cajeros automáticos. Se estima que adaptar cada uno costará entre 1.500 y 3.000 euros.
Aunque algunos de estos cambios podrían pasar desapercibidos para muchas personas, marcarán una diferencia importante para quienes más lo necesitan. Muchas veces, una letra demasiado pequeña o un menú confuso puede ser una barrera. Esta nueva ley busca eliminar ese tipo de obstáculos.
El anuncio de BBVA y Banco Santander confirma que la banca española se encamina hacia una atención más accesible e inclusiva. Los cajeros automáticos del futuro estarán diseñados para todos, sin excepciones, y eso es una buena noticia para millones de usuarios.
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