Este es el cuchillo de Mocejón que analiza la Guardia Civil para esclarecer el crimen

Ha sido un operario de limpieza del Ayuntamiento quien ha avisado tras avistar el cuchillo. Tras esto, la Guardia Civil ha encontrado en sus labores de búsqueda para esclarecer el crimen de Mocejón un cuchillo con restos biológicos humanos. Lo han hallado en un descampado próximo a la calle Dalí de la localidad toledana.

Los agentes han recogido el cuchillo "ya que pudiera ser el arma del homicidio ocurrido este domingo". Así lo ha indicado una portavoz oficial del Instituto Armado. El perro del servicio cinológico de la Guardia Civil ha marcado positivo en restos biológicos humanos en el objeto.

Este cuchillo podría ser clave para esclarecer el crimen y determinar al autor, a pesar de la confesión de Juan Francisco. El detenido de 20 años afirmó a la Guardia Civil que se deshizo del arma en una acequia cercana al Polideportivo donde cometió el crimen.

De hecho, la propia Guardia Civil ha publicado el momento en el que el perro ha localizado el cuchillo.

El padre del asesino confeso de Mocejón siembra las dudas tras sus palabras

Fernando padre del joven de 20 años arrestado por la Guardia Civil como presunto autor de la muerte del menor en Mocejón ha hablado. Ha declarado que su hijo no toma ninguna medicación y que en el pueblo lo consideran “extraño”.

Estas declaraciones fueron hechas por el padre del detenido este martes en una entrevista con Telecinco, según informa Europa Press. Además, mencionó que lleva “días sin dormir” y que su casa ha sido apedreada.

“Mi hijo no toma ninguna medicación. Siempre ha paseado por el pueblo sin causar problemas, pero lo ven muy extraño”, comentó a los medios.

Sin embargo, las dudas han surgido de estas palabras: "Mi hijo ha confesado lo que le han dicho que confiese". Así lo recoge el medio La Sexta.

Además, ha señalado que "los agentes no tienen una prueba que le incrimine". Más allá de la 'difusa' confesión del joven de 20 años. 

Asegura también que estuvo con él en todo momento salvo cuando fue a casa de su abuela. 

La familia del joven sostiene que padece una discapacidad psíquica del 75%, aunque no sigue ningún tratamiento médico. Su padre, ha defendido a su hijo ante los medios, insistiendo en que nunca había tenido problemas antes y que llevaba una vida normal. Según declaraciones del progenitor, "no toma medicación y está muy sano", dejando en manos de los jueces la valoración de la condición mental del detenido.