
Trump rescata el legado de Colón frente a la censura woke
El Día de Colón vuelve a ser símbolo de orgullo nacional frente a la censura de los movimientos progresistas
Donald Trump ha anunciado este domingo la restauración oficial del Día de Colón, tras años de censura impulsada por los movimientos progresistas.
«Le recupero de las cenizas», ha proclamado el expresidente en sus redes sociales, reivindicando la figura de Cristóbal Colón como un icono americano.
Trump ha dejado claro que no seguirá la práctica de Joe Biden de celebrar también el Día de los Pueblos Indígenas en octubre.
Según Trump, los demócratas han utilizado estas festividades para denigrar y atacar el legado de Cristóbal Colón y la historia tradicional americana.
Respuesta a Biden y la agenda woke
El demócrata Joe Biden fue el primer presidente que, en 2021, proclamó oficialmente el Día de los Pueblos Indígenas en Estados Unidos.
Biden justificó esta proclamación afirmando que Estados Unidos «nunca ha cumplido plenamente la promesa de igualdad» para los pueblos originarios.
A juicio del actual presidente, era necesario reconocer «la resiliencia y las contribuciones» de los pueblos indígenas frente a la colonización europea.
Esta visión no ha sido compartida por Trump, quien acusa a Biden de atacar símbolos históricos fundamentales para la identidad de Estados Unidos.
Colón, símbolo tradicional americano
Históricamente, el segundo lunes de octubre ha sido celebrado como el Día de Colón en toda América, en reconocimiento a su navegación histórica.

Fue el presidente Franklin D. Roosevelt quien oficializó esta festividad en 1934, tras años de celebración por parte de comunidades italoamericanas. El Día de Colón también surgió como respuesta al linchamiento de once inmigrantes italianos en Nueva Orleans en 1891.
Cristóbal Colón, aunque nunca pisó territorio actual estadounidense, se convirtió en símbolo de la herencia europea y los valores de exploración.
Ataques woke contra Colón
En los últimos años, los activistas woke han centrado sus ataques en Cristóbal Colón, culpándolo de la explotación de los pueblos indígenas. Las estatuas de Colón en Estados Unidos han sido blanco de vandalismo, derribadas o retiradas en distintas ciudades del país.
En 2017, Donald Trump ya criticó el intento del alcalde Bill de Blasio de revisar la estatua de Colón en el Columbus Circle.
Para Trump, los demócratas han impulsado una campaña sistemática para borrar figuras históricas que representan los valores tradicionales de América.
Una reivindicación política y cultural
El domingo, Trump escribió en redes: «Estoy recuperando el Día de Colón de las cenizas», reafirmando su compromiso con los símbolos nacionales.
«Los demócratas hicieron todo lo posible para destruir a Cristóbal Colón y su reputación», añadió Trump, defendiendo la memoria del explorador genovés.
Este gesto busca conectar con un electorado que ve en la cultura woke un ataque a las raíces y la historia de Estados Unidos. Trump ha apostado por restaurar la dignidad de figuras históricas frente a la tendencia progresista de revisar y reescribir el pasado.
La restauración del Día de Colón marca un nuevo episodio en la guerra cultural que enfrenta a conservadores y progresistas en Estados Unidos. Para Trump, defender a Colón es también defender la historia de superación, exploración y conquista que define el relato nacional.
Frente a quienes buscan borrar el legado europeo, el expresidente apuesta por celebrar sin complejos las raíces de la civilización americana.
La batalla por la memoria histórica sigue abierta, y Trump parece dispuesto a librarla en cada rincón de la cultura estadounidense.
Más noticias: