Esto es lo que pide el PP para honrar a personas que han contribuido a Barcelona
Dani Sirera exige “un nomenclátor plural y sin sectarismos ideológicos”
El presidente del grupo del Partido Popular en el Ayuntamiento de Barcelona, Dani Sirera, ha demandado un “nomenclátor plural y sin sectarismos ideológicos”, que honre a personas que han contribuido significativamente a la ciudad.
Sirera critica la reciente decisión del Pleno del distrito de Sants, que aprobó nombrar unos jardines en honor a Dolores Ibárruri, ‘La Pasionaria’, considerándolo un uso ideológico del nomenclátor y una evidencia de que el gobierno de Jaume Collboni sigue la línea de Ada Colau.
Los cambios de Colau y Collboni
Sirera ha recordado que en los anteriores mandatos compartidos entre Colau y Collboni, hubo una “utilización abusiva del Nomenclátor con fines partidistas”. Mencionó cambios como:
- Plaza Llucmajor por Plaza de la República
- Plaza Juan Carlos I por Plaza dels Cinc d’Oros
- Plaza de la Hispanidad por Plaza Pablo Neruda
- Avenida Príncipe de Asturias por Avenida Riera de Cassoles
- Avenida Borbón por ‘Els Quinze’
El dirigente popular propone modificar la normativa de la Ponencia del Nomenclátor para garantizar pluralidad y objetividad en los acuerdos, incorporando un representante de cada grupo municipal. Además, defiende que personalidades como Salvador Dalí, Mary Santpere, Eugenio, Victòria del Àngels, Carlos Ruiz Zafón, Adolfo Suárez, Juan Pablo II, y figuras emblemáticas como Copito de Nieve sean reconocidas en espacios públicos de Barcelona.
El debate sobre el nomenclátor de la ciudad refleja la tensión entre la preservación de la memoria histórica y la evolución de los pensamientos contemporáneos, y promete ser un punto clave en la agenda política de Barcelona.
La polémica generada por Colau y Collboni
En noviembre de 2023, se anunció que las calles San Rafael, Santa Magdalena, Santa Ágata y Santa Rosa de Barcelona cambiarán de nombre. Estas calles, que llevaban esos nombres desde hace aproximadamente 150 años, algunas desde 1830, serán renombradas a Maria Casas Mira (San Rafael), Magdalena E. Blanc (Santa Magdalena), Ágata Badia Puig-rodon (Santa Ágata) y Rosa Puig-rodon Pla (Santa Rosa). La decisión se tomó en la última reunión de la ponencia del nomenclátor, celebrada a mediados de este mes. Las gestiones para estos cambios comenzaron en el mandato anterior, bajo la alcaldía de Ada Colau.
El cambio de nombres sucitó críticas, especialmente por parte de figuras políticas que consideran esta acción como una eliminación de referencias religiosas. Alberto Fernández Díaz, expresidente del PP en Barcelona, denunció lo que él considera una persecución religiosa: "No hace falta remontarse a 1936 para que haya persecución religiosa en Barcelona nuevamente. Esta vez, afortunadamente, no es a las personas, pero sí con la pretensión del Ayuntamiento de eliminar del callejero una parte muy importante del santoral".
Por su parte, Gonzalo de Oro, del grupo municipal de Vox, criticó el cambio de nombres, señalando una continuidad en las políticas de Ada Colau por parte del actual alcalde, Jaume Collboni. "Hemos pasado de la 'coronofobia' de la anterior alcaldesa a esta manía del alcalde Collboni contra todo lo que es religioso y cultural de nuestra ciudad", afirmó de Oro, destacando que estos nombres datan del siglo XIX. De Oro también recordó que el Ayuntamiento de Barcelona ha intentado en los últimos años eliminar cualquier referencia a la monarquía o a los Borbones del nomenclátor de la ciudad. Ejemplos de esto incluyen la transformación de la plaza Juan Carlos I a plaza de Cinc d’Oros, la Avenida de Borbó a dels Quinze, y la Avenida del Príncipe de Asturias a Riera de Cassoles. Además, el Salón de Plenos de la Reina Regente pasó a llamarse Saló Pi i Sunyer.
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