EDATV La peor versión de Begoña Gómez al descubierto
El pasado de la mujer del presidente del Gobierno sale a la luz
Begoña Gómez sigue en el foco de todos. Ahora, con dos juicios a la vuelta de la esquina, la mujer del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, está en boca de todos.
Recientemente, el magistrado Juan Carlos Peinado ha tomado decisiones importantes para el futuro judicial de la mujer del presidente socialista. Sin embargo, es un dato del pasado de Begoña Gómez lo que os vamos a contar.
Hace varios años, extrabajadores de Begoña Gómez denunciaron los malos tratos que recibieron de la que, para ese momento, era su jefa.
La peor versión de Begoña
La empresa Inmark, de la cual Begoña Gómez fue socia y directora en 2016, "discriminaba" laboralmente a los trabajadores de Sevilla. Esto, en comparación con los de Madrid. La compañía contrataba trabajadores en la ciudad hispalense para desempeñar funciones de "teleoperador" con contratos de "auxiliar administrativo".
Los abusos laborales de Inmark fueron a más | Europa Press
De acuerdo con el convenio, los teleoperadores debían percibir alrededor de 7,5 euros brutos por hora, mientras que el salario de los auxiliares administrativos no superaba los 6 euros por hora.
En este contexto, se revela uno de los contratos de un teleoperador. El que fue contratado como "auxiliar administrativo" con un sueldo de 5,96 euros brutos por hora.
Los abusos laborales de Inmark fueron a más. Ya que la empresa de Begoña Gómez llegaba incluso a realizar "finiquitos negativos".
Esto significa que los empleados, cansados de las malas prácticas de la empresa, decidían abandonarla, no podían. Los abusos llegaban al punto de tener que pagar a la compañía por no dar aviso "con suficiente antelación". Esto, según OkDiario.
Otro extrabajador también denunció el nivel de "miseria" al que llegaron con él. Un día llegó 10 minutos tarde a la oficina debido a una avería en su coche, y la empresa llegó a descontar esos 10 minutos de su nómina del mes.
Hubo más "abusos"
Los abusos laborales de Inmark no terminaron ahí, ya que la empresa de la esposa de Sánchez llegaba incluso a realizar "finiquitos negativos".
Los empleados que, cansados de los malos tratos decidían abandonarla, tenían que pagar a la compañía por no dar aviso "con suficiente antelación".
Otro extrabajador también denunció el nivel de "miseria" al que llegaron con él. Un día llegó 10 minutos tarde a la oficina debido a una avería en su coche, y la empresa llegó a descontar esos 10 minutos de su nómina del mes.
Respecto al papel de la mujer de Sánchez en la empresa, este mismo exempleado no tenía ninguna duda:
"Ella la dirigía, pero desde que Sánchez saltó a la palestra, ella se quedó en un segundo plano y realizaba menos visitas".
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