Las brutales cifras de desembarcos de inmigrantes ilegales en lo que va de año
Un total de 45.122 migrantes han arribado al país de forma clandestina
En lo que va de 2024, el número de migrantes que han llegado a España de manera irregular ha alcanzado cifras récord, sobre tododo en las Islas Canarias. Según el último balance del Ministerio del Interior publicado por Europa Press. Un total de 45.122 migrantes han arribado al país de forma clandestina. Con 32.878 de ellos llegando a Canarias, lo que supone un alarmante aumento del 109% respecto al mismo período en 2023.
Este incremento en las llegadas irregulares a Canarias, una de las principales rutas migratorias hacia Europa desde África Occidental. Ha generado una enorme presión sobre las autoridades locales y los recursos disponibles en el archipiélago.
Aumento de la presión migratoria en Canarias
Entre el 1 de enero y el 15 de octubre de 2024, el número de migrantes que llegaron a Canarias en 493 embarcaciones. Esto representa un aumento dramático en comparación con las 23.537 personas que llegaron en el mismo período de 2023.
Este incremento del 39,7% es reflejo de la creciente presión migratoria que experimenta esta región de España. Si bien las cifras de desembarcos en la Península y Baleares han disminuido un 17,6%, el caso de Canarias contrasta de manera significativa.
La travesía desde África Occidental hasta las islas Canarias, aunque altamente peligrosa, sigue siendo una de las rutas usada por las mafias ingresar a Europa. Los migrantes suelen embarcarse en precarias embarcaciones, conocidas como "pateras", lo que hace que muchos no logren sobrevivir al viaje. Se estima que cientos de personas han perdido la vida en el mar en lo que va de año.
Cambios en las rutas migratorias
Un aspecto notable del aumento de la migración irregular hacia Canarias es el cambio en las rutas utilizadas por los migrantes. En años anteriores, rutas como la que atraviesa el Mediterráneo Central hacia Italia o la ruta terrestre desde Marruecos hacia Ceuta y Melilla eran predominantes.
Sin embargo, la creciente vigilancia en estas zonas y los acuerdos entre la UE y países del norte de África han desplazado el flujo hacia rutas más peligrosas. Como por ejemplo la del Atlántico hacia Canarias.
A pesar del aumento en las llegadas por vía marítima, las llegadas por tierra a las ciudades autónomas de Ceuta y Melilla han mostrado variaciones. En Ceuta, se ha registrado un incremento del 149,1%, con 2.162 personas cruzando la frontera terrestre. Mientras que en Melilla las llegadas han disminuido en un 47%, con solo 71 personas ingresando a la ciudad.
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