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Un grupo de personas con banderas catalanas es observado por dos policías en una calle.
POLÍTICA

Detenido un Mosso por presuntamente facilitar la huida de Puigdemont

La búsqueda del Honda HRV blanco se ha convertido en el principal objetivo del operativo de cactura

La operación para detener a Carles Puigdemont se convirtió en un caos que ha dejado en evidencia a las fuerzas de seguridad catalanas. El expresidente de la Generalitat logró escapar nuevamente. Esta vez con la supuesta colaboración de un agente de los Mossos d'Esquadra, dueño del vehículo en el que habría huido.

La situación desató la activación de la denominada  "operación Jaula". Un despliegue masivo de controles en toda Cataluña, con especial énfasis en las áreas metropolitanas de  Barcelona y en los puntos fronterizos como La Jonquera.

El fallido intento de detención de Puigdemont comenzó cuando se esperaba su entrada al Parlament, donde debía asistir al pleno de investidura de Salvador Illa. Las autoridades habían planeado su captura en ese momento, previendo que el separatista catalán podría intentar hacer una aparición pública tras años de exilio. Sin embargo, Puigdemont consiguió eludir el dispositivo policial, desapareciendo de la vista de los agentes y de los medios de comunicación que cubrían el evento.

Policías se encuentran de pie junto a dos furgonetas azules en una calle con árboles y un arco monumental al fondo.

Según fuentes cercanas a la investigación, el vehículo utilizado en la fuga es un Honda HRV blanco. Las primeras pesquisas apuntan a que este coche pertenece a un mosso d'Esquadra que ha sido detenido por su posible complicidad en la evasión.

Este agente habría permitido que Puigdemont usara su coche para escapar de las inmediaciones del Parlament sin ser detectado. Su arresto ha causado un gran revuelo, ya que pone en entredicho la lealtad de algunos miembros de la policía autonómica en momentos críticos para la estabilidad política de la región.

El operativo "Jaula" se activó inmediatamente después de que se perdiera el rastro de Puigdemont. Inicialmente, los controles se establecieron en las salidas de Barcelona, principalmente en las zonas norte y sur del área metropolitana. Con el objetivo de interceptar cualquier vehículo que pudiera estar relacionado con la fuga.

La operación se ha extendido rápidamente, cubriendo ahora toda Cataluña y centrándose especialmente en los pasos fronterizos hacia Francia, como La Jonquera. En un intento por evitar que Puigdemont vuelva a salir del país.

Los Mossos d'Esquadra han intensificado los registros de vehículos en distintos puntos críticos, como L'Hospitalet de Llobregat, donde se han reportado inspecciones exhaustivas en la plaza Cerdà y sus alrededores. Estos controles han provocado importantes retenciones y una creciente frustración entre los conductores. Pero las autoridades consideran que son medidas necesarias para intentar capturar al expresidente catalán.

Un coche Honda blanco rodeado de personas.

La búsqueda del Honda HRV  blanco se ha convertido en el principal objetivo del operativo. Se ha distribuido la matrícula del vehículo entre las Áreas Policiales Básicas.

Se ha dado la orden de detener cualquier coche que coincida con la descripción. La policía catalana está bajo una enorme presión para lograr la detención de Puigdemont. Ya que su fuga representa un desafío directo a la autoridad del Estado y a la credibilidad de las fuerzas de seguridad.

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