Catalá ahorra casi 2 millones a los valencianos, mientras Sánchez sube impuestos

La concejal de Hacienda de Valencia, María José Ferrer San Segundo, ha destacado el impacto positivo de la bonificación del 95% aplicada al Impuesto sobre el Incremento del Valor de los Terrenos de Naturaleza Urbana, conocido como plusvalía, en las herencias. Según ha explicado, esta medida ha permitido un ahorro de 1.779.653 euros a 3.103 vecinos de Valencia entre enero y agosto de 2024. En comparación, durante el mismo periodo del año anterior, bajo la gestión de Compromís y el PSOE, solo 274 contribuyentes se beneficiaron de esta bonificación, con un ahorro total de 71.200 euros.

Ferrer San Segundo subrayó que el actual Gobierno Municipal, liderado por la alcaldesa María José Catalá, ha implementado una reducción fiscal significativa y generalizada, lo que está beneficiando a las economías familiares, especialmente en casos de herencias. La nueva regulación elimina los requisitos "restrictivos" del anterior gobierno, como la exigencia de que solo se bonificara la vivienda habitual, la convivencia obligatoria con el fallecido durante los dos años previos a su muerte, y la prohibición de vender la propiedad durante los cuatro años posteriores a la herencia.

“Si analizamos por ejemplo la tributación de las plusvalías vemos que la actual regulación establecida por el Gobierno Municipal que lidera María José Catalá ha permitido ya un ahorro de 1.779.653,47€ para 3103 contribuyentes que han podido beneficiarse de la bonificación del 95%, frente a los 71.259,77€ que se ahorraron en enero-agosto de 2023 los 274 contribuyentes que pudieron acogerse a este porcentaje de bonificación con la regulación anterior de Compromis y PSOE”, ha resaltado.

Con estas reformas, la concejal señaló que "prácticamente se ha dejado de pagar la plusvalía en casos de herencias entre familiares directos". Además, destacó que la reducción de la presión fiscal no solo afecta a la plusvalía, sino que también incluye una rebaja del Impuesto sobre Bienes Inmuebles (IBI) y de otras tasas municipales, lo que ha supuesto un ahorro total de más de 60 millones de euros para los vecinos y comerciantes de la ciudad.

Ferrer San Segundo criticó la gestión anterior de Compromís y el PSOE, acusándoles de haber aumentado la presión fiscal sin aliviarlos durante la crisis, mientras que el actual gobierno busca "beneficiar a más contribuyentes y mejorar la economía local".