Agricultores vuelven a la protesta contra el abandono rural y el acuerdo UE-Mercosur
Asaja y COAG advierten que, sin cambios inmediatos, el sector agrario español llegará a un punto de no retorno
El 16 de diciembre, agricultores y ganaderos marcharán en Madrid para expresar su malestar por las políticas que afectan al sector agrario. Las protestas, convocadas por Asaja y COAG, surgen tras el acuerdo UE-Mercosur, que consideran un golpe mortal para la agricultura nacional.
El campo ya mostró su descontento el año pasado con tractoradas masivas, pero el problema persiste sin soluciones reales del Gobierno. Asaja y COAG aseguran que las medidas del Ministerio de Agricultura tras las protestas fueron insuficientes para paliar los problemas del sector.
El reciente acuerdo con Mercosur ha desatado la indignación por permitir importaciones baratas que incumplen las normativas europeas. Los productos agrícolas de Mercosur, Chile o Marruecos entran al mercado europeo a precios bajos, causando pérdidas insostenibles para el campo español.
Los sindicatos denuncian que estas importaciones no cumplen las estrictas normas de producción que se exigen a los agricultores europeos. Esto está provocando el cierre de explotaciones, la pérdida de empleo en el sector y un impacto económico negativo en las zonas rurales.
El campo exige un cambio en las políticas agrícolas para garantizar ingresos dignos, evitar cierres y fomentar el relevo generacional. Piden reformas esenciales en la Ley de la Cadena Agroalimentaria para proteger los intereses de los pequeños agricultores.
También demandan adaptar la reforma laboral y los costes salariales a las particularidades del sector agrario para aliviar su carga. El sistema de seguros agrarios sigue siendo otro punto de crítica por no ajustarse a las necesidades reales del campo español.
La falta de inversiones en infraestructuras hidráulicas agrava la crisis, afectando a numerosas regiones con déficit de agua. Las últimas inundaciones provocadas por la DANA en el sureste peninsular evidenciaron la mala gestión hídrica en varias cuencas.
Los agricultores critican que no se tomen medidas preventivas ni se invierta en una política hidráulica más eficiente y sostenible.
El abandono del campo por parte de las administraciones está llevando a la desaparición de explotaciones y a un éxodo rural creciente. Las pérdidas económicas, sumadas a la falta de apoyo institucional, hacen insostenible mantener la actividad agrícola en muchas zonas.
Los sindicatos recalcan que el campo no solo es vital para la economía, sino también para el equilibrio social y ambiental del país. Asaja y COAG advierten que sin cambios inmediatos, el sector agrario español llegará a un punto de no retorno en pocos años.
El 16 de diciembre será una fecha clave para que agricultores y ganaderos alcen su voz y exijan respuestas eficaces y sostenibles. Con estas movilizaciones, el campo espera no solo visibilizar sus problemas, sino también obtener compromisos claros del Gobierno. La lucha por el futuro del campo no es solo de los agricultores; es un tema que afecta al conjunto de la sociedad española.
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