Sorpresa mayúscula: Guillermo y Harry, mudos al ver a sus primas Spencer

Las familias con una larga tradición suelen estar marcadas por figuras que, de generación en generación, perpetúan una herencia de distinción y relevancia. En la casa Spencer, esta herencia se traduce en elegancia, estilo y una constante presencia en el escenario social. Kitty, Amelia y Eliza Spencer, primas de los príncipes Guillermo y Harry, se han destacado como figuras clave en este mundo de brillo y glamour.

Aunque la atención mediática a menudo se centra en otros miembros de la realeza, las tres hermanas han ido ganando protagonismo en el circuito social. Su asistencia a eventos de alto perfil no pasa desapercibida, y cada vez son más las invitaciones que reciben. Sin embargo, cuando las tres Spencer se reúnen, es imposible que su aparición no se convierta en noticia, acaparando todos los focos de la prensa.

Lady Kitty acapara todas las miradas por su vestido

Para la Serpentine Gallery Summer Party, Kitty Spencer eligió un vestido aguamarina que parecía sacado de un cuento. Con escote dejando los hombros al descubierto, fajín y falda amplia, su look fue pura fantasía. Los bordados florales añadieron romanticismo y un aire clásico que encantó a todos.

Ya había deslumbrado en otras ocasiones, como en la boda de Harry y Meghan. Allí fue elegida la mejor vestida por los lectores de ¡Hola!. Su presencia ahora en Kensington Gardens confirmó que sigue siendo un referente de estilo absoluto.

Lady Kitty Spencer está casada con el empresario Michael Lewis y es madre de una niña. Kitty combina maternidad y elegancia con una soltura admirable, siendo una figura habitual de grandes eventos.

Amelia y Eliza Spencer lo apostaron todo al rojo

Las gemelas, Amelia y Eliza Spencer, no se quedaron atrás y apostaron todo al rojo, con vestidos largos de corte impecable. Amelia destacó con una manga capa, mientras Eliza optó por un sutil drapeado. Sus looks reflejaron personalidad y complicidad entre hermanas.

Los clutchs brillantes y joyas de diamantes elevaron aún más sus estilismos, su sincronía volvió a robar protagonismo en la alfombra. El efecto Spencer se sintió con más intensidad que nunca, cada una con su estilo, pero todas con elegancia natural. Y aunque los príncipes Guillermo y Harry no estuvieron presentes, el eco del momento sin duda llegó hasta ellos.

Otras invitadas apostaron por propuestas audaces, por ejemplo, Lady Amelia Windsor, con un minivestido fucsia y plataformas coloridas, jugó con la estética sesentera. Cate Blanchett sorprendió con un diseño de conchas, mientras Eiza González deslumbró con un vestido transparente. Todas aportaron su visión del glamour, pero las Spencer dejaron una impresión difícil de superar.