
Saltan las alarmas en Mónaco: una experta señala qué le pasa a Charlene
La psicóloga no se guarda nada sobre Charlene de Mónaco y da a conocer el verdadero motivo de su estado actual
Charlene es una de las figuras más conocidas de la realeza europea y ha sido el centro de la atención desde su llegada a Mónaco. Su vida, que comenzó de manera bastante diferente en Sudáfrica, dio un giro inesperado cuando se unió al príncipe Alberto en matrimonio. A lo largo de los años, ha tenido que enfrentarse a numerosas dificultades, algunas personales y otras derivadas de su nuevo rol en la realeza.
Aunque su posición de princesa consorte de Mónaco es una de gran prestigio, la presión sobre Charlene ha sido constante. Los rumores, las expectativas públicas y los conflictos familiares han marcado su vida. Lo que le ha acarreado tanto apoyo, como críticas.

La opinión de los expertos: Charlene y la amenaza a su rol
Según la psicóloga Lara Ferreiro, la principal preocupación de Charlene se relaciona con sus hijos. La psicóloga señala que la intranquilidad de Charlene radica en la competencia que siente de los hijos mayores de Alberto, Jazmín Grace y Alexandre Coste. Ferreiro afirma que “el único objetivo de Charlene es que sus hijos, especialmente Jacques, reinen”.
La presión por asegurarse de que su hijo ocupe el trono parece ser una obsesión para la princesa. Lo que la ha llevado a sentirse constantemente amenazada por los otros hijos de su esposo. Lara Ferreiro agrega que la competencia simbólica entre los hijos legítimos e ilegítimos de Alberto está afectando emocionalmente a Charlene.
La psicóloga asegura que la princesa se siente desplazada y el rol que podrían tener los hijos mayores de Alberto, complica su bienestar emocional. Esta situación ha sido una fuente de angustia constante para Charlene, quien intenta mantener su lugar y el de sus hijos dentro de la realeza.

Charlene y Alberto: una relación marcada por la tensión
La relación entre Charlene y Alberto de Mónaco ha sido objeto de atención mediática desde el principio. Aunque ambos han intentado mantener una imagen de unidad y estabilidad, las tensiones han sido evidentes. La 'princesa triste' ha sido vista en numerosas ocasiones con gestos de desdén y seriedad, alimentando los rumores sobre su matrimonio y su estado emocional.
Las dificultades dentro de su relación comenzaron desde el momento en que se enteró, por medio de la prensa, que Alberto tenía dos hijos ilegítimos. "Al enterarse de que tenía dos hijos secretos, podía haber incluso hecho que Charlene, que fue la princesa más triste en su boda, que durante años haya estado extremadamente triste y deprimida". "Las apariciones públicas eran de gestos forzados, serios", agregó Ferreiro.
Mucho se ha rumoreado sobre cómo Charlene ha afrontado la presión por cumplir con las expectativas de la realeza y soportado los conflictos con Alberto. Sin embargo, a pesar de todo esto, Charlene sigue luchando por el futuro de sus hijos. Sigue adelante para que Jacques pueda ser el príncipe de Mónaco.
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