
La reina Letizia admite que es verdad y Felipe ya ha puesto fecha: sucederá en días
Todo está confirmado, la fecha está agendada y los planes avanzan con paso firme y sin espacio para sorpresas
Cuando la reina Letizia da luz verde a algo, el interés se multiplica y atrae todos los focos mediáticos. Y si a eso se suma que Felipe VI ya ha puesto fecha, no hay margen alguno para que algo no ocurra. Se acerca una actividad que la familia real española espera con ansias, más aún, ahora que sus dos hijas están de regreso.
Felipe VI y Leticia manejan con precisión el equilibrio entre lo privado y lo institucional. Pero hay ocasiones en las que el calendario se impone con fuerza. Y esta es una de esas oportunidades en que todo debe estar planificado a la perfección y no quede espacio para errores.

Marivent ultima los detalles
Aunque aún faltan días para que lleguen los reyes, en Palma ya se siente la antesala de su visita. El Palacio de Marivent ajusta la logística para recibirlos como cada verano. A su llegada, comienza la temporada más institucional de sus vacaciones.
Aunque muchos asocian sus días en la isla solo con vacaciones, la actividad no se detiene. Felipe VI y Letizia combinan descanso con compromisos oficiales, aprovechando para encontrarse con autoridades y vecinos de la isla. También realizan salidas informales y paseos discretos por la isla para un descanso en familia.

Ya hay fecha marcada en rojo
El gran momento del verano real ya está marcado en rojo. La tradicional recepción en el Palacio de Marivent será el lunes 4 de agosto. Una velada que exige precisión en cada detalle.
Allí estarán Felipe, Letizia y previsiblemente sus hijas, Leonor y Sofía. Incluso podría sumarse la reina Sofía, como lo ha hecho en años anteriores. La fecha permite prever que la llegada de la familia real será unos días antes, quizá de forma privada.

Un evento cargado de simbolismo
La recepción reunirá a unas 600 personas del mundo político, empresarial, cultural y deportivo. Todos serán recibidos uno a uno por la familia real a las puertas del Palacio. El catering volverá a ser de alto nivel, como el año anterior, con Maca de Castro y Marga Coll.
Este tipo de encuentros refuerzan el papel institucional de la familia real. Les permite estar cerca de los ciudadanos y mantener viva una de sus tradiciones más visibles. Y aunque parezca una simple reunión, su impacto es profundo.
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