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La reina Sofía y Marisa Paredes sonríen al aire libre con un globo de diálogo vacío sobre ellas.
CORAZÓN

El mensaje que Marisa Paredes recibió de doña Sofía un año antes de su triste adiós

Un inesperado gesto de doña Sofía hacia la inolvidable actriz española revela una conexión llena de admiración y respeto

La interpretación española está de luto tras la partida de Marisa Paredes, una de las figuras más icónicas del cine nacional. La actriz ha dejado una huella imborrable en la gran pantalla y en el corazón de quienes la admiraban. Ahora, tras su despedida, resurgen momentos especiales de su vida, como aquel mensaje que recibió de doña Sofía en el que destacó su magistral interpretación de la reina.

Marisa Paredes no solo brilló en el universo de Pedro Almodóvar, sino también en el cine internacional, demostrando su talento y versatilidad. Sin embargo, ¿qué había detrás de esta conexión entre Paredes y doña Sofía? ¿Qué significó este reconocimiento para una actriz tan comprometida con sus ideales?

Marisa Paredes con cabello canoso y ropa dorada sostiene un cartel con el texto #SEACABÓ en un evento de premios Goya.

El mensaje que Marisa Paredes recibió de doña Sofía un año antes de su triste adiós

A pesar de declararse republicana, Marisa Paredes interpretó con gran dignidad a la reina Sofía en Felipe y Letizia. Esta fue una producción que exploró momentos clave de la vida de la familia real. Este papel, aunque desafiante, fue llevado con la elegancia y profesionalismo característicos de la actriz.

Paredes había compartido este emotivo episodio durante una entrevista hace apenas un año. "Me dijo: «Has hecho muy bien de mí»", reveló sobre su conversación con la reina Sofía.

Una mujer mayor sonríe mientras lleva un abrigo de colores en una habitación decorada con arte en las paredes.

La actriz reconoció que había ciertos nervios por interpretar a personajes tan relevantes, aunque estaban contentos con el resultado. "Ha sido muy hermoso, estábamos un poquito asustados, pero lo conseguimos", reconoció.

Además, Marisa Paredes destacó que le gustó interpretar a la madre del Felipe VI: "Hacer de la reina Sofía me gustó. Cómo todas las cosas que hago, intento llevarlas con mucha dignidad y salvarlas. Es verdad, yo soy republicana, quiero decir que esto de los reyes y tal me resulta muy anacrónico".

La carrera de Marisa Paredes: marcada por la excelencia y la audacia

Marisa Paredes se consolidó como una de las máximas representantes del cine español gracias a su talento y dedicación. Su relación profesional con Pedro Almodóvar marcó un antes y un después en su carrera.

Esto la llevo a protagonizar películas inolvidables como Tacones lejanos y La flor de mi secreto. Esta última le valió una nominación al Goya y dejó frases memorables como: "Ay Betty, menos beber, qué difícil me resulta todo".

Marisa Paredes sonriente sostiene un trofeo en forma de busto en un evento con luces de fondo.

Sin embargo, su legado no se limitó al universo Almodóvar. Marisa participó en proyectos internacionales de gran prestigio, como La vida es bella de Roberto Benigni y El espinazo del diablo de Guillermo del Toro. Su versatilidad le permitió trabajar con cineastas como Arturo Ripstein y Amos Gitai, entre otros, dejando claro que era una actriz que trascendía fronteras.

El compromiso de Marisa Paredes más allá del escenario

Marisa Paredes no solo se destacó por su trabajo actoral, sino también por su compromiso social y político. Durante su presidencia en la Academia de Cine, enfrentó con valentía momentos polémicos, como la Guerra de Irak, y apoyó iniciativas a favor de la cultura y la libertad de expresión.

En los últimos años, su presencia en actos reivindicativos era constante. Defendió causas como la sanidad pública, Palestina y los derechos sociales. Incluso en eventos, como la capilla ardiente de Concha Velasco, expresó su desacuerdo con la presencia de figuras políticas que consideraba que representaban intereses contrarios al bienestar social.

Marisa Paredes con cabello castaño claro y ropa de colores brillantes posa frente a un cartel de cine.

La elegancia de Marisa Paredes era tan innata como su talento. Nacida en una familia humilde, nunca olvidó sus orígenes. "Sí, soy la hija de la portera. ¿Y qué?", solía decir, recordando con orgullo su infancia y los valores que la formaron.

Su valentía y autenticidad también se reflejaban en su forma de abordar la actuación. "Hago todo con dignidad", aseguró en varias ocasiones, y su legado confirma esas palabras. 

No cabe duda de que la pérdida de Marisa Paredes ha dejado un vacío imposible de llenar en el cine español. La conexión con doña Sofía fue solo un episodio más que demuestra cómo la actriz trasciende generaciones, ideales y fronteras. Su talento, elegancia y compromiso seguirán siendo fuente de inspiración para las futuras generaciones de actores y actrices. 

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