España se fija en un detalle del rey Carlos III y no gustará a Camila: ‘Basta ya’

Los Windsor captan la atención en cada una de sus apariciones, pero las miradas se centran en Carlos III y Camila, más que en nadie. Y en eventos tradicionales como Ascot, cada detalle es observado de forma minuciosa. Desde la sonrisa de un heredero hasta el color de la vestimenta, nada pasa desapercibido.

Carlos III y la reina Camila son figuras centrales en este tipo de eventos, por ser las figuras centrales de la monarquía británica y de la familia real. Sus gestos, actitudes y estilo personal suelen estar acordes con el protocolo que exige su rol. Sin embargo, los comentarios no siempre son los esperados por los protagonistas.

El detalle de Carlos III que no pasa desapercibido para nadie

Durante el programa Aruser@s, el conductor Alfonso Arús no pudo evitar destacar un detalle que se repite año tras año. “Basta ya, me llamaréis obsesivo, pero este señor solo tiene un traje”, dijo entre risas. Se refería al conjunto gris que Carlos III ha usado en varias actividades oficiales este año, incluida la de Ascot.

El comentario no quedó ahí. Arús lanzó con humor una crítica inesperada: “Ese traje huele…, huele a viejo”. El plató reaccionó entre carcajadas y comentarios sorprendidos ante la observación del presentador.

Tatiana Arús también sumó su opinión, destacando que Camila renueva su estilo constantemente. Mientras tanto, Carlos III solo modifica el chaleco. Una elección que algunos interpretan como falta de frescura y otros como una muestra de sencillez.

La reina Camila destacó por su elegancia en Ascot

Ascot es sinónimo de etiqueta, tradición y estilo. Es uno de los eventos más emblemáticos del Reino Unido, donde la imagen cuenta tanto como la ceremonia. Por eso, ver a Carlos III con la misma vestimenta repetidamente, es un detalle que no pasó inadvertido.

Además del atuendo, hubo otro momento que captó la atención del programa: una pelea entre asistentes trajeados. Arús comentó la escena diciendo: “Cuando bebes ya está”, restando seriedad al incidente. El contraste entre glamour y realidad fue evidente.

Otro tema que fue tratado en el programa fue la ausencia de Kate Middleton, una figura habitual y querida por el público. Y que sorprendió con su ausencia, puesto que ya había confirmado que asistiría. Su no presencia también alimentó las conversaciones sobre lo que ocurre en el entorno real.