Ana Rosa Quintana confirma el rumor del apagón eléctrico y muchos señalan a Juan Roig

El histórico apagón eléctrico que dejó a oscuras a gran parte de España ha provocado todo tipo de reacciones en los medios. Una de las más comentadas ha sido la de Ana Rosa Quintana, que desde su programa ha compartido cómo vivió esa noche sin luz. Su noticia no ha pasado inadvertida, sobre todo por lo que ha dicho sobre Mercadona, empresa de Juan Roig.

Ana Rosa Quintana ha confesado que en su barrio la electricidad no volvió hasta las diez y media de la noche. Durante horas estuvo sin acceso a televisión, internet ni información actualizada, lo que generó un ambiente de incertidumbre. Según explicó en directo, solo le quedó recurrir a la radio del coche para enterarse de lo que estaba ocurriendo.

Pero lo que más ha llamado la atención ha sido su mención a Mercadona, el supermercado que tiene cerca de su casa. “Ni me atreví a ir”, dijo Ana Rosa, al describir las enormes colas que vio desde lejos. Aun así, destacó el papel que jugaron estos establecimientos, que a pesar del apagón siguieron abiertos en muchos lugares del país.

En redes sociales, sus declaraciones fueron interpretadas como una forma de poner en valor la gestión de Juan Roig durante la crisis. Muchos usuarios señalaron que Mercadona fue de las pocas empresas que logró mantener parte de su actividad en marcha. Esa capacidad de respuesta ha sido reconocida por cientos de ciudadanos que agradecieron poder comprar productos básicos.

El esfuerzo de Mercadona y Juan Roig

El hecho de que los supermercados permanecieran abiertos ha sido visto como una muestra de organización y compromiso. En un momento en el que nada funcionaba, tener un lugar donde encontrar velas, agua o conservas fue clave. Por eso no sorprendió que el nombre de Juan Roig empezara a sonar con fuerza en las redes como uno de los protagonistas silenciosos de la jornada.

Ana Rosa no mencionó directamente al empresario, pero muchos lo vieron entre líneas. Su referencia a Mercadona no parecía casual, sobre todo al tratarse de una empresa que ya había sido clave durante la pandemia. La cadena volvió a demostrar que sabe reaccionar en situaciones críticas, algo que los ciudadanos no han dejado de valorar.

Aunque la presentadora se mostró cauta al contar su experiencia, su testimonio ha tenido un impacto mediático. Su frase sobre el supermercado de su barrio ha dado pie a muchos análisis sobre el papel de las grandes superficies en momentos de emergencia. También ha abierto el debate sobre qué empresas están realmente preparadas para responder ante lo inesperado.

La situación que vivió Ana Rosa no fue única, pero su forma de contarlo ha ayudado a visibilizar la importancia de ciertas decisiones empresariales. Juan Roig ha sido señalado como un líder que, una vez más, ha sabido estar a la altura. Su modelo de gestión ha sido elogiado por mantener la operatividad y garantizar el abastecimiento cuando todo se detuvo.

El testimonio de Ana Rosa Quintana

Durante horas, las calles estaban a oscuras y los comercios cerraban por falta de luz. Sin embargo, algunos supermercados lograron seguir funcionando con generadores y personal organizado. Esta capacidad para adaptarse rápidamente es lo que ha hecho que muchos coloquen a Roig como un ejemplo de eficacia y previsión.

La historia de Ana Rosa, con sus latas de sardinas y su transistor sin pilas, refleja una realidad vivida por miles de personas. Pero también ha servido para poner sobre la mesa un tema más amplio: quiénes fueron capaces de ofrecer soluciones cuando más se necesitaban. Y en ese contexto, el nombre de Juan Roig ha aparecido con fuerza.

El apagón ha sido una prueba de resistencia para todos, pero también una oportunidad para evaluar la preparación de ciertos sectores. La alusión de Ana Rosa a Mercadona no solo ha sido anecdótica, sino un reflejo de la confianza que muchos ciudadanos depositan en empresas que responden sin necesidad de hacer ruido. Y aunque ella no quiso ir al supermercado por precaución, su reconocimiento ha sido claro y contundente.