'Del 17 al 23 de febrero': gran sorpresa en España por esto que pasará con el tiempo

Si algo ha quedado claro en las últimas semanas es que este invierno en España no está siendo típico. Cuando pensamos en este momento del año, lo que nos viene a la mente son temperaturas bajo cero, heladas y paisajes nevados. Aunque en algunos momentos hemos tenido episodios de frío intenso, en general, las últimas semanas han estado marcadas por temperaturas suaves y estabilidad atmosférica.

La semana sigue la tendencia: más calor de lo normal

Para aquellos que esperaban un giro en el tiempo con la segunda mitad de febrero, las noticias no son alentadoras. Según la AEMET, Agencia Estatal de Meteorología, esta semana seguirá siendo inusualmente cálida. Tendremos temperaturas más propias de la primavera que del pleno invierno.

A través de un mensaje en sus redes sociales, la AEMET ha sido clara al respecto. "La semana del 17 al 23 de febrero será más cálida de lo habitual, sobre todo en el norte y este de la Península. Ambiente más propio de finales de marzo o comienzos de abril".

Esto ha supuesto una sorpresa para muchos. No se trata solo de temperaturas ligeramente por encima de lo normal, sino de valores claramente primaverales.

Temperaturas por encima de los 20 grados

Si analizamos la previsión de la AEMET, encontramos que durante esta semana las máximas alcanzarán los 23 o 24 grados en muchas zonas de la Península. En lugares como Murcia, se podría llegar incluso a los 26 grados.

Las temperaturas mínimas también reflejan esta tendencia cálida. En la mayoría de las ciudades no se registrarán heladas. Salvo en zonas de montaña donde las temperaturas aún podrán descender por debajo de los 0 grados.

Esto resulta inusual para el mes de febrero, una época en la que, históricamente, el frío suele dominar gran parte del país. Sin embargo, este año el invierno parece estar cediendo terreno a un clima más templado que recuerda más al inicio de la primavera.

Los meteorólogos explican que esta situación se debe a la combinación de altas presiones sobre la Península y la entrada de vientos del sur, que arrastran aire más cálido desde África. Esto impide la llegada de masas de aire frío desde el Atlántico o desde el norte de Europa, lo que suele ser habitual en esta época del año.

Un invierno sin grandes complicaciones

Si bien esta tendencia de temperaturas suaves ha sido constante, lo sorprendente es que no se prevé que cambie a corto plazo. De momento, las lluvias serán escasas, la nieve quedará relegada a zonas altas y el frío seguirá sin hacer acto de presencia en la mayor parte del país.

A falta de ver si marzo traerá alguna sorpresa en forma de cambios bruscos, todo apunta a que febrero cerrará como un mes atípico. Con temperaturas mucho más altas de lo habitual y una sensación casi primaveral en muchas regiones.