
La moneda de 2 euros que te paga un billete de ida y vuelta a París: vale un pastizal
Este ejemplar de 2 euros es ahora uno de los más buscados y cuenta con varios detalles que lo hacen especial
El coleccionismo de monedas es un hobby mezcla el interés por la historia, el arte y la inversión. Cada pieza puede ser testigo de una época o un evento. Y, en algunos casos, pequeñas variaciones en su diseño o edición limitada pueden convertir piezas cotidianas en tesoros valorados.
En este caso, la moneda de 2 euros de la que hablamos es un ejemplo perfecto de ese fenómeno. A pesar de que se acuñó para ser de uso común, puede alcanzar precios sorprendentes en el mercado numismático.
Esta es la moneda de 2 euros que te invita a París
En 2004, San Marino acuñó su primera moneda conmemorativa de 2 euros en calidad Flor de Cuño (Proof), destinada a coleccionistas. Sólo se fabricaron 110.000 unidades, un número muy reducido que ya de por sí la convierte en una pieza valiosa para los amantes del coleccionismo.

El valor actual de esta moneda se ha disparado. Esto se explica por tres factores clave: escasez, presentación de alta calidad y interés del mercado.
Por otro lado, la combinación de edición limitada, calidad Proof y demanda por coleccionistas internacionales ha impulsado su precio. De este modo, ahora se convierte en una pieza que puede financiar una escapada de fin de año.
El valor actual de esta moneda de 2 euros
A pesar de su escaso valor nominal, la moneda de 2 euros de San Marino se puede encontrar por nada menos que 150 euros en páginas como eBay. Es decir, una cifra perfecta para que, si buscas bien, puedas financiar ese billete de avión con el que conocer París.

Por otra parte, San Marino ha repetido emisiones similares en años posteriores. Este detalle ha creado precedentes de aumento continuado de valor, superando incluso los 150 euros según el caso.
El mercado numismático sigue activo; conforme aumente la visibilidad y se decremente la disponibilidad, el valor puede continuar subiendo. Además, cabe destacar que las ediciones iniciales de cualquier serie suelen ser las más cotizadas, y la de San Marino 2004 no es la excepción. Si la tienes, lo mejor es consultar con un experto que te ayude con el precio y durante el proceso para hacer tu inversión.
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