Aviso del BBVA sobre las facturas de gas: es fundamental saber esto

Cuando adquieres una nueva vivienda, uno de los pasos fundamentales es activar los suministros básicos como la luz, el agua y, por supuesto, el gas. El problema, explica BBVA, es que en muchas ocasiones este trámite tan importante levanta muchas dudas.

Entre las más habituales están el mismo proceso de dar de alta el gas, los factores que influyen en el precio y qué documentos necesitan. Además, el tiempo que puede conllevar también es un detalle a tener en cuenta. Por todo ello, desde BBVA han querido explicar de forma fácil este proceso y el tiempo que conlleva.

BBVA explica lo primero que hay que saber sobre el suministro

El coste de dar de alta el gas depende de varios factores, comenzando por la ubicación de la vivienda. Es crucial verificar si la vivienda ya cuenta con una instalación de gas y acometida, ya que esto influirá directamente en el precio. Si es la primera vez que se solicita el alta, el coste incluye el pago de ciertos derechos, como los de alta y acometida.

Según el BBVA, si la vivienda nunca ha tenido suministro de gas tendrás que abonar dos conceptos principales:

Derechos de alta: Este pago varía según la tarifa de gas que se aplique a la vivienda (RL.1, RL.2, RL.3 o RL.4) y la comunidad autónoma en la que te encuentres. Y es que cada región establece sus propios costos.

Derechos de acometida: Se trata de un pago único por la instalación del punto de conexión entre la vivienda y la red de distribución de gas. El precio es estándar en toda España, pero puede variar según el peaje de acceso asignado al suministro.

BBVA también señala que es importante saber si la distancia entre el contador del gas y la acometida supera los 6 metros. En caso afirmativo, podrías enfrentar un coste adicional por la ampliación de la acometida.

¿Y qué pasa si quiero reactivar el gas?

Si la vivienda ya ha tenido suministro de gas en el pasado y solo se necesita reactivarlo, primero debes verificar si los derechos de acometida siguen vigentes. Estos tienen una validez de cinco años. Es decir, si no ha pasado este tiempo, solo deberás pagar los derechos de alta para reactivar el suministro.

El proceso de dar de alta el gas, según BBVA

Si es la primera vez que solicitas el alta, BBVA recomienda asegurarse de que la instalación de gas esté completa, incluyendo la caldera o calentador. Si no la tienes, deberás contactar con una empresa instaladora para realizarla. Esta te ayudará a obtener el Certificado de la Instalación de Gas y el Código CUPS (Código Universal de Punto de Suministro).

Una vez que tengas la instalación y el CUPS, dirígete a la comercializadora de gas que prefieras y elige la tarifa. La comercializadora se encargará de gestionar el alta con la distribuidora. Finalmente, esta te enviará un técnico para conectar la vivienda a la red de gas y colocar el contador.

En caso de reactivación del suministro, contacta primero con la distribuidora para que verifiquen el estado de la instalación. Si todo está en orden, podrás proceder con la reactivación.

Los documentos que suelen pedir y el tiempo que tarda, según el BBVA

Para dar de alta el gas, generalmente se solicitan los siguientes documentos:

• Datos del titular (nombre, DNI).
• Dirección de la vivienda.
• Escritura de propiedad o contrato de alquiler.
• Certificado de la Instalación Receptora Individual (IRI).
• Código CUPS.
• Licencia de primera ocupación (para viviendas nuevas).

El proceso de activación del gas suele tardar entre 5 y 7 días hábiles desde que se presenta y aprueba la documentación. Este tiempo puede variar ligeramente según la distribuidora y la carga de trabajo que tengan en ese momento.

Dar de alta el gas es un paso esencial al mudarte a una nueva vivienda. Con la información adecuada y los documentos en orden, el proceso es sencillo y relativamente rápido. Cuando menos te lo esperes ya podrás disfrutar de tu hogar con todos los servicios básicos funcionando.