Youtube: Hogarmania, Billion Photos, Getty Images Tres trucos definitivos para limpiar la grasa de tu cocina si no tienes tiempo
Mantener la cocina libre de grasa no tiene por qué ser una tarea ardua y consume mucho tiempo
Limpiar la cocina puede ser una tarea tediosa, especialmente cuando se trata de eliminar la grasa acumulada. Afortunadamente, existen métodos sencillos, baratos y rápidos para mantener tu cocina impecable sin invertir mucho tiempo. Aquí te presentamos tres trucos definitivos para limpiar la grasa de tu cocina de manera eficiente.
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Vinagre Blanco y Agua Caliente: Un aliado infalible
Uno de los métodos más efectivos y económicos para limpiar la grasa de la cocina es el uso de vinagre blanco. Este producto no solo es accesible y barato, sino también muy eficiente para descomponer la grasa acumulada en las superficies.
Cómo usarlo:
Mezcla partes iguales de vinagre blanco y agua caliente en una botella con atomizador.
Rocía la mezcla sobre las superficies grasosas de la cocina, como la encimera, los azulejos y la estufa.
Deja actuar la solución durante unos minutos para que el vinagre descomponga la grasa.
Limpia con un paño húmedo o una esponja suave.
El vinagre no solo elimina la grasa, sino que también desinfecta y deja un olor fresco. Este truco es perfecto para una limpieza rápida y efectiva sin necesidad de productos químicos agresivos.
Truco fácilisimo | Getty Images
Bicarbonato de Sodio: El poder absorbente
El bicarbonato de sodio es otro ingrediente común que resulta muy útil para eliminar la grasa difícil de las superficies de la cocina. Su capacidad abrasiva suave lo hace ideal para limpiar sin rayar.
Cómo usarlo:
Espolvorea bicarbonato de sodio sobre las áreas grasosas de la cocina.
Humedece una esponja o paño con agua y frota suavemente el bicarbonato sobre la superficie.
Para la grasa más rebelde, mezcla bicarbonato de sodio con un poco de agua para formar una pasta y aplícala sobre las manchas.
Deja actuar durante 10-15 minutos y luego frota y enjuaga con agua caliente.
Este método es especialmente útil para limpiar las áreas alrededor de la estufa y la campana extractora, donde la grasa tiende a acumularse más.
Limón y Sal: Frescura y poder desengrasante
El limón es conocido por sus propiedades desengrasantes y su capacidad para dejar un aroma fresco y limpio. Combinado con sal, se convierte en un potente limpiador natural.
Cómo usarlo:
Corta un limón por la mitad y exprime un poco de su jugo sobre las superficies grasosas.
Espolvorea sal sobre el jugo de limón.
Utiliza la mitad del limón como una esponja para frotar la mezcla de jugo de limón y sal sobre las áreas grasosas.
Deja actuar durante unos minutos y luego limpia con un paño húmedo.
La acidez del limón descompone la grasa, mientras que la sal actúa como un abrasivo suave para eliminar la suciedad. Este truco es ideal para limpiar áreas pequeñas y difíciles de alcanzar, como los rincones y las esquinas de la cocina.
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