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Mujer con una lupa observando una imagen de aceite de oliva y aceitunas.
SOCIEDAD

Los 3 sencillos trucos con los que podrás ahorrar dinero en aceite de oliva

Consejos prácticos para enfrentar el alto precio del aceite de oliva en España

El aceite de oliva, un elemento básico de la dieta mediterránea, ha visto un aumento significativo en su precio, alcanzando hasta 10 euros por litro en algunos casos.

Este incremento ha llevado a muchos consumidores a buscar formas de ahorrar sin renunciar a este valioso producto. Te contamos algunas estrategias y trucos que pueden ayudarte a gestionar mejor tu consumo de aceite de oliva y reducir costos.

Hombre con traje azul señalando una jarra de aceite de oliva sobre una mesa de madera con aceitunas verdes.

Estrategias para ahorrar en el uso del aceite de oliva

En los últimos meses, el precio del aceite de oliva ha experimentado una subida considerable, situándose entre 7 y 10 euros por litro en promedio.

Esto se debe a diversos factores como la inflación, la sequía y otros problemas que afectan la producción. En España, que es el principal productor mundial, estos incrementos han sido especialmente notorios.

1. Usar de difusores de aceite de oliva en spray

Uno de los métodos más efectivos para reducir el consumo de aceite es el uso de  difusores en spray. Estos dispositivos permiten aplicar una capa fina y uniforme de aceite sobre los alimentos, lo cual es ideal para cocinar y aliñar ensaladas.

Al utilizar menos cantidad, la botella de aceite dura mucho más tiempo, compensando así el alto precio del producto.

Aun así, no siempre resultan tan efectivos para el ahorro. Generalmente, sale más rentable comprar el envase y el aceite por separado. 

Botellas de aceite y otros productos en un estante de supermercado.

2. Emplear las cantidades de aceite de oliva adecuadas en la cocina

Es común utilizar más aceite del necesario al cocinar, especialmente al freír. Sin embargo, reducir la cantidad a un nivel justo no solo ayuda a ahorrar, sino que también mejora la salud.

Por ejemplo, para freír patatas, es suficiente con un dedo de aceite en la sartén en lugar de sumergir completamente los alimentos.

Además, secar bien los alimentos antes de freírlos puede prevenir la degradación rápida del aceite, permitiendo su reutilización hasta cuatro veces.

Una ensalada en un tazón azul con señales de advertencia y prohibición mientras se vierte aceite de una botella.

3. Buscar alternativas al aceite de oliva

Aunque el aceite de oliva virgen extra es ideal para ensaladas y platos fríos, no es la mejor opción para freír. Optar por aceite de orujo de oliva o aceite de girasol  alto oleico puede ser una alternativa más económica y adecuada para altas temperaturas. Estos aceites tienen menos ácidos grasos poliinsaturados, lo que los hace más estables al calor y más aptos para la fritura.

Además, existen otras alternativas como el aceite de maíz, otra alternativa económica que puede utilizarse para cocinar y freír.

Hombre pensativo en un campo de olivos con una imagen de aceite de oliva vertiéndose en un círculo rojo.

Compras inteligentes

Es crucial comparar precios entre diferentes supermercados. Según un estudio de FACUA, las diferencias de precios entre las cadenas pueden ser significativas.

Alcampo, por ejemplo, ofrece algunas de las opciones más asequibles, mientras que Carrefour tiende a tener los precios más altos. Estar atento a ofertas y descuentos también puede suponer un ahorro considerable.

Ahorrar en aceite de oliva no solo es posible, sino también necesario en un contexto de precios elevados. Implementar pequeños cambios en la forma de usar y comprar este producto puede marcar una gran diferencia en el presupuesto familiar.

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