En España, seis ciudades destacan por la singularidad de contar con dos catedrales, reflejando siglos de evolución arquitectónica y adaptaciones a las necesidades religiosas de distintas épocas. Estas ciudades muestran gran riqueza patrimonial unida a los aires de lo nuevo.
Estas son las seis ciudades españolas que cuentan con dos catedrales en su riqueza arquitectónica
Salamanca: la historia en piedra dorada
Salamanca es famosa no solo por su universidad, sino también por sus dos catedrales que marcan una mezcla fascinante de estilos y épocas.
Catedral Vieja: construida entre los siglos XII y XIV, esta catedral es un ejemplo del románico tardío que transita hacia el gótico. Su Torre del Gallo y el retablo mayor, elaborados en piedra de Villamayor, resaltan su tonalidad dorada.
Catedral Nueva: iniciada en 1513 y terminada en el siglo XVIII, es un majestuoso edificio gótico que evoluciona hacia el barroco. La ornamentación de su fachada principal y su cuerpo cilíndrico reflejan la riqueza del Renacimiento.
Lérida: dominando la colina y la ciudad
En Lérida, Cataluña, encontramos una combinación única entre la imponente Seu Vella y la elegante Catedral Nueva.
Seu Vella: ubicada en la colina de la Suda, la Seu Vella es una catedral gótica construida entre los siglos XIII y XV. Su claustro ofrece vistas espectaculares y su nave central destaca por la altura de su bóveda de crucería.
Catedral Nueva: construida entre 1761 y 1781 en el centro de la ciudad, representa el barroco y el neoclásico. Presenta un interior luminoso y ricamente decorado con altares dorados y esculturas ornamentadas.
Cádiz: entre el gótico y el neoclásico
Cádiz, conocida por su historia marinera, presenta dos catedrales que muestran la transición de estilos arquitectónicos a lo largo de los siglos.
Catedral Vieja: la Iglesia de Santa Cruz, construida en el siglo XIII, es un edificio gótico mudéjar que sirvió como catedral principal hasta el siglo XVIII. Su ubicación en el casco antiguo la hace un punto de referencia histórico.
Catedral Nueva: construida entre 1722 y 1838, esta catedral mezcla el barroco y el neoclásico. Su cúpula dorada y las torres gemelas ofrecen una vista impresionante tanto desde la ciudad como desde el mar.
Zaragoza: testigo del mudéjar y el barroco
Zaragoza, capital de Aragón, alberga dos catedrales que son testimonio de la diversidad arquitectónica española.
Catedral del Salvador (La Seo): construida entre los siglos XII y XVIII, es una muestra de la evolución desde el arte mudéjar hasta el barroco. Muestra una impresionante fachada barroca y un retablo gótico-flamenco.
Basílica del Pilar: construida entre los siglos XVII y XVIII, esta basílica destaca por sus cúpulas decoradas y su estilo barroco y neoclásico, está dedicada a la Virgen del Pilar.
Plasencia: gótico y renacimiento en armonía
En la provincia de Cáceres, Plasencia ofrece un contraste entre el gótico y el renacimiento en sus dos catedrales.
Catedral Vieja: construida en los siglos XIII y XIV, presenta un estilo románico-gótico con una destacada portada del Enlosado y un claustro que muestra la transición hacia el gótico.
Catedral Nueva: edificada entre los siglos XV y XVII, combina el gótico tardío con el renacimiento. La Puerta del Perdón es un espléndido ejemplo de la escultura renacentista.
Vitoria: dualidad de románico y gótico
Vitoria-Gasteiz, en el País Vasco, completa la lista con dos catedrales que representan épocas distintas.
Catedral Vieja: también conocida como Catedral de Santa María, su construcción comenzó en el siglo XIII en estilo gótico. Destaca por su estructura fortificada y su torre defensiva, reflejando su origen como iglesia-fortaleza.
Catedral Nueva: la Catedral de María Inmaculada, construida en el siglo XX, presenta un estilo neogótico. A pesar de su modernidad, mantiene una coherencia con la tradición gótica, ofreciendo un espacio luminoso y de gran altura.
Visitar estas catedrales proporciona un viaje fascinante a través de la historia y la diversidad arquitectónica de España.
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