La semana decisiva de Sánchez entre la presión política y el caso Begoña Gómez

Pedro Sánchez  se enfrenta a una semana cargada de desafíos judiciales que podrían marcar su futuro político.

Este lunes,  la Audiencia de Madrid decidirá sobre el caso de su esposa, Begoña Gómez. Quien se encuentra investigada por presuntos delitos relacionados con corrupción en los negocios y tráfico de influencias.

La situación de Gómez, vinculada a contratos irregulares en el sector público, ha generado una intensa atención mediática. Además de una creciente presión sobre el líder del PSOE.

El caso contra Gómez no es el único frente judicial abierto para Sánchez. El martes, el Tribunal Superior de Justicia de Madrid  deberá decidir si admite a trámite una querella presentada por el propio presidente contra el juez Jesús María Peinado. Quien lidera la instrucción del caso de su esposa.

Sánchez ha acusado al juez de prevaricación, en un movimiento que ha sido percibido como un intento de interferir en el proceso judicial.

La investigación de Begoña Gómez

Begoña Gómez ha sido señalada en una investigación por supuestas irregularidades en contratos relacionados con el sector público. Según las acusaciones, Gómez habría utilizado su posición para influir en la adjudicación de contratos a empresas cercanas.

Los delitos que se investigan incluyen tráfico de influencias y corrupción en los negocios. Lo que ha puesto en el ojo del huracán tanto a Gómez como a su esposo, Pedro Sánchez.

La Audiencia de Madrid deberá tomar una decisión clave sobre el futuro de este caso. Si bien hasta el momento la defensa de Gómez ha intentado desmentir las acusaciones. 

El avance de la investigación podría suponer un duro golpe para la credibilidad del Gobierno. El impacto de estas acusaciones sobre la imagen pública de Sánchez es innegable. 

Querella de Pedro Sánchez contra el juez

El martes, el TSJM debatirá la querella presentada por Pedro Sánchez contra el juez Peinado. Sánchez acusa al magistrado de prevaricación por dos decisiones tomadas en el marco de la investigación a su esposa.

La primera de ellas fue la citación del presidente como testigo en el caso. Lo que, según los abogados del Estado, vulnera su derecho a prestar declaración por escrito dada su condición de jefe del Ejecutivo.

La segunda decisión fue la negativa del juez a permitir que Sánchez testificara por escrito. Lo que ha llevado al equipo legal del presidente a presentar la querella.

La Sala de lo Civil y lo Penal del Alto Tribunal madrileño deberá decidir si admite a trámite esta acusación. Un hecho que podría complicar aún más el panorama judicial para Sánchez.

En caso de que se admita la querella, el futuro de Peinado al frente de la investigación contra Gómez quedaría en entredicho. No obstante, aunque se apartara al juez del caso, la investigación seguiría su curso bajo la dirección de otro magistrado.