Esto es lo que piensan los radicales del PSOE de Juan Lobato ''Es un...''

Juan Lobato, secretario general del PSOE-M, enfrenta un creciente descontento en su partido tras decisiones controvertidas y desalineaciones estratégicas con Ferraz y Moncloa.

La crisis estalló cuando se supo que registró ante notario mensajes de WhatsApp que involucraban a la pareja de Isabel Díaz Ayuso en presuntas irregularidades. Lo que desató tensiones internas y demandas de dimisión por parte de sus detractores.

Según a publicado Europa Press, el incidente, calificado por muchos socialistas como una "traición". Esto evidenció fisuras en el liderazgo de Lobato.

Fuentes internas han señalado a la agencia que este movimiento, sin previa consulta al partido, ha puesto en jaque la confianza de los militantes. Quienes ven en esto una estrategia personal más que una acción colectiva. Este hecho ocurre en un momento crítico para el PSOE, cuando la unidad debería ser la prioridad en la antesala del Comité Federal.

El ala crítica, conocida como los "simanquistas", ha sido particularmente vocal en su desaprobación hacia Lobato. Liderados por figuras como Rafael Simancas, han destacado la necesidad de que el PSOE-M se alinee con las directrices de Pedro Sánchez. Para fortalecer su posición electoral en un feudo tradicionalmente dominado por el PP.

Para ellos, cualquier desvío estratégico es un riesgo innecesario y podría debilitar al partido en futuras elecciones.

Simancas, junto a otras figuras clave del partido, ha subrayado que los liderazgos en Madrid deben evitar mensajes "radicales" y trabajar en el "surco adecuado". Es decir, seguir el camino marcado por el Gobierno central.  Este enfoque busca reforzar el respaldo electoral, especialmente en la Comunidad de Madrid, donde el PSOE ha tenido dificultades para consolidarse como una fuerza dominante.

El registro notarial no solo avivó la desconfianza hacia Lobato, sino que también desató rumores sobre posibles movimientos internos para sustituirlo.  Pilar Sánchez Acera, estrecha colaboradora de Pedro Sánchez, se ha convertido en el epicentro de esta controversia, lo que ha generado especulaciones sobre las intenciones detrás de los mensajes registrados.

En medio de este panorama, Lobato ha defendido su decisión como un acto personal y ha negado haber consultado a Ferraz antes de actuar. Sin embargo, esta postura no ha logrado aplacar las críticas, y su liderazgo parece cada vez más frágil. Desde Ferraz, se señala que este tipo de acciones, lejos de fortalecer al partido, lo exponen a un desgaste innecesario en un momento en que la estabilidad interna debería ser prioridad.

El Supremo cita a Juan Lobato como testigo en el caso contra el Fiscal General

El Tribunal Supremo ha citado a Juan Lobato, secretario general del PSOE de Madrid, como testigo en la investigación contra el fiscal general del Estado. La comparecencia está programada para el 29 de noviembre a las 10:00 horas.

Esta citación surge tras la publicación de informaciones que señalan a Moncloa por filtrar documentos confidenciales relacionados con Alberto González Amado. Según estas fuentes, se intentó implicar a Lobato en la difusión de dicha información.

Lobato ha negado rotundamente haber recibido presiones desde Moncloa para difundir la confesión de González Amador. Asegura que la información le llegó a través de los medios de comunicación y no desde la Fiscalía General.

Además, el líder socialista madrileño ha registrado en una notaría sus conversaciones con el Gobierno sobre este asunto. Afirma que lo hizo sin consultar previamente, como medida preventiva ante posibles ataques.

La investigación del Supremo se centra en determinar si hubo una filtración ilegal de documentos confidenciales desde la Presidencia del Gobierno. Se busca esclarecer si se intentó utilizar esta información para perjudicar políticamente a la presidenta de la Comunidad de Madrid.