EDATV ¿Cómo ha sido la muerte del líder de Hezbolá Hasán Nasralá?
La muerte del líder chií desata temores de una brutal respuesta mientras la tensión en Líbano se dispara
El conflicto entre Israel y Hezbolá ha alcanzado un nuevo punto álgido. Especialmente con el reciente anuncio de las Fuerzas de Defensa de Israel sobre la muerte de Hasán Nasralá, el líder de Hezbolá. Nasralá, quien durante décadas fue la cara visible de la resistencia libanesa contra Israel, murió tras intensos bombardeos en los suburbios del sur de Beirut.
La operación se llevó a cabo el viernes por la tarde, con Israel lanzando más de 40 ataques aéreos en distintas zonas del Líbano.
La noticia fue anunciada por las FDI a través de su cuenta en la red social X (anteriormente conocida como Twitter), donde publicaron. "Hasán Nasralá ya no podrá aterrorizar al mundo".
De este modo, confirmaban la eliminación del líder de Hezbolá tras años de tensiones y enfrentamientos entre ambas partes. Este hecho marca un hito en la lucha de Israel contra uno de sus más acérrimos enemigos. Esto podría desatar una nueva fase de violencia en el ya convulso panorama del Medio Oriente.
Contexto de los ataques recientes
Este bombardeo sobre Beirut no fue un hecho aislado, sino parte de una serie de ataques israelíes que se han intensificado en las últimas semanas. Las FDI también llevaron a cabo una operación en Siria, donde eliminaron a un alto mando del Movimiento de Resistencia Islámica (Hamás), Ahmed Muhammad Fahd.
Según las autoridades israelíes, Fahd era responsable de coordinar múltiples operaciones terroristas desde el sur de Siria. Actualmente se encontraba en pleno desarrollo de un nuevo ataque contra Israel.
El portavoz en árabe de las FDI, Avichay Adraee, declaró. "Fahd ha sido eliminado cuando planeaba llevar a cabo otro complot terrorista en el futuro inmediato. Las FDI seguirán atacando y eliminando a los terroristas de Hamás dondequiera que operen".
La operación en Siria y el bombardeo en Beirut forman parte de una estrategia más amplia de Israel. Dicha estrategia tiene como objetivo debilitar tanto a Hezbolá como a Hamás, organizaciones que consideran una amenaza directa.
En las últimas semanas, las fuerzas israelíes han intensificado sus ataques aéreos en diferentes puntos del Líbano y Siria. Se concentran principalmente en los bastiones de Hezbolá en Beirut y las posiciones de Hamás en el sur de Siria. Estos ataques han dejado un número significativo de víctimas y han causado una creciente tensión en la región.
Reacciones internacionales y consecuencias
La muerte de Nasralá ha generado reacciones mixtas en la comunidad internacional. Mientras que Israel celebra lo que considera un golpe crucial contra Hezbolá, muchos temen que esta acción pueda desencadenar una nueva ola de violencia.
Hezbolá, conocido por su capacidad de movilizar a miles de combatientes, podría responder con fuerza a la muerte de su líder. En Beirut se han reportado escenas de caos y destrucción, mientras los residentes tratan de asimilar el impacto de los ataques.
a muerte de Nasralá ha generado reacciones mixtas en la comunidad internacional. | Europapress
En paralelo, el gobierno libanés ha condenado los bombardeos israelíes, calificándolos de "una violación flagrante de la soberanía del Líbano". Sin embargo, el estado libanés que enfrenta una grave crisis, tiene pocas herramientas para enfrentar a Israel o controlar el poder de Hezbolá.
El futuro de la región
Con la eliminación de Nasralá, el futuro de Hezbolá se encuentra en un punto crítico. Aunque el grupo ha demostrado ser resiliente en el pasado, la pérdida de su líder podría fracturar su estructura interna.
No obstante, también podría generar una respuesta violenta e impredecible por parte de la milicia chií, que buscará vengar la muerte de su líder. Este escenario plantea interrogantes sobre el futuro de las relaciones entre Israel y Líbano, así como sobre la estabilidad del Medio Oriente en general.
Las operaciones de Israel contra Hamás en Siria reflejan una estrategia que no solo se centra en Líbano, sino que abarca la región. El objetivo de las FDI parece ser el de neutralizar cualquier amenaza potencial antes de que se materialice.
En los próximos días, la atención estará centrada en las posibles represalias por parte de Hezbolá y sus aliados. Así como en la respuesta internacional a este nuevo capítulo en el conflicto. Israel, por su parte, ha dejado claro que no dudará en seguir atacando a los grupos que considera terroristas.
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