Así fue como Begoña Gómez usó espacios de La Moncloa para actividades privadas

Begoña Gómez, esposa Pedro Sánchez, está siendo investigada por varios delitos relacionados con el uso indebido de recursos públicos. Según información publicada por OK Diario, Gómez habría utilizado un despacho de La Moncloa como su lugar habitual de trabajo. Desde este espacio, se habría involucrado en distintas actividades privadas, entre ellas, su gestión en la Universidad Complutense y el Instituto de Empresa (IE).

Según fuentes cercanas al caso, en varias ocasiones, Gómez habría organizado reuniones desde este despacho para promocionar proyectos relacionados con el software para empresas por el que ahora está imputada.  Estos hechos habrían tenido lugar mientras se encontraba al frente de programas académicos en las instituciones mencionadas, actividades que no estarían directamente relacionadas con sus funciones como esposa del presidente.

Además, Begoña Gómez, presuntamente, habría utilizado los jardines de La Moncloa para grabar material que luego se difundió a través de canales de YouTube  de uno de sus programas académicos. Estos actos, según los informes, habrían sido parte de su estrategia para difundir su influencia en ámbitos privados, utilizando recursos públicos para fines personales.

En esas reuniones también estaba presente Cristina Álvarez, quien se desempeñaba como directora de Programas de Presidencia y asistente personal de Gómez. Según la denuncia, Álvarez también estaría implicada en los hechos y deberá comparecer el 26 de febrero ante el juez. Se ha señalado que Álvarez ayudaba a Gómez en diversas gestiones, incluidas las relacionadas con sus máster y cátedras en la Complutense.

Una de las gestiones que se ha hecho pública incluye un correo electrónico enviado por Álvarez a Reale Seguros, patrocinador de la cátedra de Gómez. En el mensaje, Álvarez solicitaba al patrocinador que continuara con su apoyo financiero, aunque fuera con una cantidad inferior. Según el correo, Begoña Gómez le había transmitido su deseo de que el patrocinador siguiera involucrado en el proyecto.

La relación de Gómez con Cristina Álvarez comenzó antes de su nombramiento en La Moncloa. Álvarez, quien fue contratada en 2018, estuvo en contacto con Gómez para ofrecerle el puesto sin que pasara por un proceso de selección formal.

Gómez había indicado que se trataba de una práctica habitual para las esposas de los presidentes del Gobierno. Aunque esto ha sido puesto en duda por algunos expertos legales.

Mientras tanto, el proceso judicial sigue su curso, y tanto Begoña Gómez como Cristina Álvarez enfrentan acusaciones serias relacionadas con el uso indebido de recursos públicos y tráfico de influencias. La citación de Álvarez para comparecer ante el juez refuerza la sospecha de que se usaron medios oficiales para impulsar intereses privados, algo que está siendo analizado minuciosamente por las autoridades.