Ramón García, lejos de Patricia Cerezo y con una nueva ilusión: su familia lo celebra

Ramón García ha abierto su corazón en una entrevista exclusiva para EL PAÍS. El veterano presentador ha compartido aspectos íntimos de su vida personal y profesional. Ha hablado con sinceridad, con calma y con emoción y ha revelado algo que su entorno más cercano ya celebraba: tiene una nueva ilusión.

El rostro emblemático de la televisión española ha confesado que está viviendo un momento muy especial. “Estoy en un momento pletórico de trabajo, haciendo En compañía y preparando la nueva temporada de Grand Prix. Tengo una rutina muy estricta, unos horarios muy marcados, y uno no tiene 25 años, pero tiene unos 63 cojonudos, no me quejo”, ha afirmado Ramón con orgullo.

En los últimos años, su vida ha cambiado profundamente: Ha perdido a sus padres y se ha separado de Patricia Cerezo. Ha atravesado momentos muy duros, pero ha seguido adelante. Lo ha hecho como siempre: con profesionalidad, con esfuerzo y con entrega.

Ramón García, ex de Patricia Cerezo, entrelaza su vida profesional con su vida personal

En su relato, ha recordado uno de los episodios más duros de su carrera. "Enterré a mi madre un viernes y el lunes estaba haciendo el programa. Al primer invitado de ese día se le había muerto también su madre", ha confesado Ramón García.

"Mientras veía la ficha con su historia me di cuenta de que lo que leía era justo lo que me pasaba a mí. Le dije antes de empezar: ‘Mira, no sé cómo vamos a hacer esto, pero pueden pasar dos cosas: que nos pongamos a llorar ambos o que nos ayudemos. Te pido por favor que me ayudes’", ha contado emocionado.

Ramón García ha demostrado que está fuerte tras su divorcio de Patricia Cerezo y la perdida de sus progenitores

Ramón García ha aprendido a apoyarse en sus invitados. Ha entrelazado su vida con la de ellos. Ha encontrado en el programa, En compañía, un refugio y ahora, también ha encontrado una nueva ilusión: el regreso del mítico Grand Prix.

Su familia ya lo ha notado debido a que lo han visto más animado, más centrado y más feliz. Lo han celebrado con él y han vuelto las risas, los planes y la ilusión por el futuro.

Ramón García no piensa dejar la televisión. Se ha reencontrado con su vocación. Y ha demostrado que, a sus 63 años, sigue teniendo la energía, el talento y el carisma que lo convirtieron en uno de los presentadores más queridos de toda España.