Juan Carlos I y su amigo, Pedro Campos, no lo ocultan: la gran decisión ya está tomada

El rey emérito Juan Carlos I ha vuelto a España y volvió a Sanxenxo el lunes pasado. Como en otras ocasiones, se ha instalado en la casa de su amigo Pedro Campos pero esta vez ha sorprendido. No se ha dejado ver como en otras visitas.

A pesar de la polémica por las memorias recién publicadas de Bárbara Rey, el emérito ha optado por la discreción. Ha evitado por ahora el Real Club Náutico y no ha comenzado los entrenamientos. Aun así, ha confirmado su participación en las regatas del fin de semana.

Ha decidido que volverá al timón de ‘El Bribón’. A sus 87 años, sigue demostrando que conserva el espíritu competitivo. Aunque su movilidad es limitada, no ha perdido las ganas.

Juan Carlos I y Pedro Campos toman una decisión muy importante

Durante estos días, don Juan Carlos ha permanecido en la vivienda de Campos debido a que no ha salido apenas. Sin embargo, ha recibido visitas y han pasado por la casa algunos amigos cercanos. Todo indica que pronto llegará algún miembro de su familia: Se ha hablado de la infanta Elena y también de la infanta Margarita.

Al margen de la actividad náutica, el rey ha disfrutado de la gastronomía gallega. Como en cada visita a Sanxenxo, no ha faltado el marisco. Ha llegado un camión de una reconocida marisquería de la zona y ha traído una selección de pescados y mariscos, todo fresco.

Juan Carlos y Pedro Campos no lo han escondido y han mostrado su afición por los productos del mar gallego. Han compartido comidas en la intimidad, sin cámaras, sin prisas y en buena compañía.

La llegada del camión no ha pasado desapercibida. Ha sido la señal definitiva, la gran decisión ya está tomada, ambos han acordado repetir este gesto en cada visita del Emérito. No quieren improvisar, quieren asegurarse del mejor marisco y han encontrado en esta fórmula la manera ideal de celebrar su reencuentro.

Juan Carlos I está pasando unos días tranquilos junto a Pedro Campos

Mientras tanto, los rumores siguen creciendo. Se ha especulado con un posible traslado definitivo de Juan Carlos a Portugal.

Ha habido conversaciones y ha buscado propiedades cerca de Estoril o Cascáis. Necesita privacidad. También seguridad pero por ahora, su refugio está en Sanxenxo.

Allí, con Pedro Campos, ha vuelto a encontrar calma. Ha disfrutado del mar, ha degustado mariscos y ha dejado claro que, pese a todo, no renuncia a sus pasiones. Ni a sus costumbres.