
Jarro de agua fría del príncipe Guillermo a Meghan Markle: toma una polémica decisión
Un movimiento inesperado del príncipe Guillermo provoca nuevas tensiones familiares y reabre una herida del pasado de Meghan Markle
La relación entre los príncipes Guillermo y Harry no solo no mejora, sino que se complica todavía más tras la última inesperada maniobra del próximo heredero al trono. Y es que el monarca ha traído de vuelta a una figura del pasado que toca una fibra muy sensible para Meghan Markle.
Lejos de promover un acercamiento con su hermano pequeño, el príncipe Guillermo ha decidido mover ficha de manera contundente. La reciente incorporación de Jason Knauf al círculo cercano del heredero ha generado una verdadera tormenta en los medios británicos. ¿Por qué? ¿Qué une a Jason Knauf y a Meghan Markle?

El príncipe Guillermo da un enorme mazazo a Meghan Markle
El nombre de Jason Knauf no es nuevo en la historia reciente de los Sussex. Se trata del antiguo secretario de comunicaciones de Harry y Meghan, fue quien en su momento denunció a la duquesa de Sussex por acoso laboral ante el personal de Palacio. Ahora, su regreso como director ejecutivo del Premio Earthshot reabre heridas que parecían cerradas.
Aunque su currículum destaca en el ámbito medioambiental, su nombramiento no se interpreta como algo inocente. Para muchos observadores, la elección de Knauf supone un claro mensaje dirigido a la pareja instalada en California. Se trata de un paso que revive uno de los episodios más amargos que Meghan ha tenido que enfrentar.
El propio príncipe Guillermo ha ensalzado la labor de Knauf, afirmando que su visión será clave en los próximos años para el desarrollo del Earthshot. No obstante, detrás de las declaraciones públicas, se percibe una clara toma de posición. Un gesto que, lejos de calmar las aguas, añade combustible al conflicto familiar.
Viejas heridas de Meghan Markle vuelven a salir a la luz
El caso de Jason Knauf quedó grabado en la memoria mediática por un correo enviado en 2018. En dicho mensaje, alertaba sobre supuestos comportamientos intimidatorios por parte de Meghan hacia sus asistentes, provocando situaciones de estrés y lágrimas. El escándalo emergió justo antes de la histórica entrevista de los Sussex con Oprah Winfrey.
Meghan Markle siempre ha negado rotundamente esas acusaciones. Según su equipo legal, las denuncias de Knauf fueron manipuladas para dañar su imagen pública. Aun así, el impacto mediático de aquella filtración dejó una huella difícil de borrar en la percepción popular.

Con este nuevo nombramiento, parece quedar claro que la reconciliación entre los hermanos está cada vez más lejos. Mientras Guillermo refuerza la vieja estructura palaciega, Harry y Meghan siguen tratando de construir su vida y su relato al margen de la monarquía.
La grieta que separa a los príncipes de Inglaterra se ensancha con cada movimiento. Y Meghan Markle, una vez más, se convierte en el epicentro de una batalla silenciosa que amenaza con no tener final.
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