
Anita Williams llega al límite por lo ocurrido en la prueba de 'Supervivientes'
Anita Williams ha dicho basta y ha llegado al límite por lo ocurrido con sus compañeros en la prueba de ‘Supervivientes’
La tensión ha estallado en la isla de Supervivientes debido a que Anita Williams ha llegado a su punto de ruptura. Los últimos acontecimientos en Supervivientes han sorprendido a todos y en el programa Supervivientes Última Hora, Laura Madrueño lo ha contado todo. La presentadora ha desvelado que la convivencia se ha vuelto insostenible.
Anita Williams se ha alejado del resto. Las continuas disputas han provocado esta separación. La convivencia con sus compañeros se ha complicado.

Laura Madrueño ha mostrado unas imágenes impactantes y en ellas se ha visto a Anita cuidando el fuego. A su alrededor, estaban Makoke y Montoya. Nadie ayudaba.
Anita Williams tiene una fuerte disputa con sus compañeros de Supervivientes por cuidar del fuego
Esa situación ha molestado a Pelayo: “Tantas personas ahí en el fuego es imposible”, ha declarado. Anita no ha tardado en responder. “Yo tengo que estar en el fuego, no me puedo mover de aquí”, ha dicho con firmeza.
La discusión ha ido a más. La convivencia ha alcanzado su punto más crítico y justo en ese momento ha llegado un mensaje: Poseidón les ha enviado un nuevo pergamino. En él, se les ha encomendado una misión: pescar 30 peces esta semana.

Los supervivientes se han puesto en marcha y han salido a pescar sin perder tiempo pero los problemas no han tardado en llegar. Anita Williams ha pedido las gafas de buceo y ningún compañero se las ha querido dar.
Ella se ha sentido rechazada. “Parecéis unos niños de 3 años, parecéis mis hijos”, ha exclamado. “Luego si no conseguís el reto diréis que es mi culpa”, ha añadido con indignación.
Anita Williams se ha sentido rechazada por todos en Supervivientes y ha llegado a su límite
Anita Williams ha confesado estar harta debido a que se ha sentido excluida. Siempre se le critica por no hacer nada. Pero cuando quiere participar, no la dejan.
Estas palabras han encendido las alarmas y el público se ha quedado sin palabras. La joven ha mostrado su lado más vulnerable. También su carácter más fuerte.

El fuego, las gafas, el reto, todo ha estallado. La convivencia pende de un hilo. La playa ya no es un refugio, es un campo de batalla.
Anita Williams ha alcanzado su límite. El programa ha vivido uno de sus momentos más tensos y lo que ha ocurrido ha dejado claro que Supervivientes no es solo una prueba física sino también muy mental. Es una guerra emocional.
Más noticias: