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Hombre con gorro y camiseta amarillos, sorprendido, con las manos en la cabeza, frente a una noria gigante y un río.
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La moneda con la que te puedes pagar una semana entera de vacaciones en Londres

Esta moneda de 20 peniques del Reino Unido, debido a un error de acuñación, se ha convertido en una joya valiosa

El coleccionismo de monedas es un mundo lleno de sorpresas, donde un pequeño detalle puede transformar una pieza común en un tesoro codiciado. Un ejemplo reciente de esta peculiaridad es la moneda de 20 peniques del Reino Unido. Acuñada en 2008, se ha convertido en el "santo grial" para los coleccionistas.

Esto se debe a un error de fabricación que la distingue de las demás, elevando su valor a alturas insospechadas. Con ventas que alcanzan hasta 250 veces su valor nominal, esta moneda ha captado la atención de expertos y aficionados por igual.

El error que convirtió una moneda común en una joya de colección

En 2008, la Royal Mint del Reino Unido acuñó aproximadamente 136 millones de monedas de 20 peniques. Sin embargo, un error en el proceso de fabricación resultó en que alrededor de 250.000 de estas monedas fueran emitidas sin fecha de acuñación. Un detalle crucial en cualquier pieza numismática.

Este error, conocido como "mule error", surgió cuando se utilizó un diseño anterior para el anverso (la cara de la moneda). En combinación con un nuevo diseño en el reverso (la parte trasera), resultando en una moneda sin fecha.

La ausencia de la fecha es lo que distingue a estas monedas de las demás, convirtiéndolas en piezas raras y altamente valoradas. Recientemente, una de estas monedas se vendió por 50 libras esterlinas, lo que equivale a aproximadamente 66 dólares, un valor impresionante considerando que su valor nominal es de solo 20 peniques.

Moneda de veinte peniques británica sobre un fondo de monedas doradas.

Cómo identificar una moneda de 20 peniques sin fecha

Si tienes una moneda de 20 peniques en casa, es posible que estés sentado sobre una pequeña fortuna sin saberlo. Identificar una de estas monedas es relativamente sencillo. Lo primero que debes hacer es observar la moneda detenidamente y verificar si tiene una fecha visible en el anverso.

En las monedas emitidas correctamente, la fecha aparece junto a la efigie de la reina Isabel II. Si no encuentras ningún año en la moneda, podrías tener en tus manos uno de estos raros y valiosos ejemplares.

Estas monedas sin fecha son fácilmente identificables por varias características específicas. En el anverso, no aparece la fecha de acuñación, y se puede ver el retrato de la reina Isabel II, la inscripción "Elizabeth II" se encuentra en la parte superior. Mientras que en la parte inferior se lee "D · G · REG · F · D".

El reverso de la moneda muestra un fragmento del escudo de armas real, diseñado por Matthew Dent, junto a la leyenda "Twenty pence". Aunque estas monedas han estado en circulación y pueden mostrar signos de desgaste, su verdadero valor reside en el error de fabricación que las convierte en piezas únicas. Fabricadas en cuproníquel, estas monedas tienen un peso de 5,0 gramos y un diámetro de 21,40 milímetros.

Moneda de ocho lados con la imagen de una figura femenina en relieve, rodeada de otras monedas doradas.

El mercado de coleccionistas: un mundo lucrativo

El mercado de coleccionistas de monedas es vasto y puede ser extremadamente lucrativo. Piezas que alguna vez se consideraron comunes pueden alcanzar precios sorprendentes en subastas y ventas privadas, especialmente cuando presentan errores de impresión o características únicas.

En el caso de la moneda de 20 peniques sin fecha, se han registrado ventas de hasta 70 libras en subastas. Y algunos vendedores las han listado en sitios especializados por hasta 100 libras.

Según informes del Wiltshire Times, una transacción reciente alcanzó las 50 libras, más 5,60 libras adicionales en costos de envío. Es posible que esta cifra pueda parecer modesta en comparación con las ventas de otras monedas raras. Pero sigue siendo una ganancia significativa si consideramos su valor nominal original.

Si eres aficionado a la numismática o simplemente tienes algunas monedas guardadas, merece la pena revisar si tienes uno de estos ejemplares de 20 peniques. No solo estarías poseyendo una rareza, sino que podrías estar sentado sobre una pequeña fortuna. En el fascinante mundo del coleccionismo de monedas, nunca se sabe qué tesoro podrías descubrir.

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