¿Cómo se transmite la Viruela del Mono y cuáles son sus síntomas?

La viruela del mono,  también conocida como mpox o viruela símica, es una enfermedad zoonótica causada por el virus del mismo nombre. Este patógeno pertenece al género orthopoxvirus, relacionado con el virus de la viruela.

Aunque la viruela del mono afecta principalmente a animales como roedores y primates. También puede transmitirse a los seres humanos, generando brotes en diversas partes del mundo. A continuación, exploraremos cómo se transmite, los síntomas más comunes y las medidas preventivas necesarias para evitar su propagación.

¿Cómo se Transmite la Viruela del Mono?

La transmisión de la viruela del mono ocurre principalmente a través del contacto directo con un animal o persona infectada. Este contacto puede ser con las lesiones cutáneas, fluidos corporales o materiales contaminados, como ropa o ropa de cama. Aunque también puede ocurrir mediante gotas respiratorias, este mecanismo requiere un contacto cercano y prolongado (al menos cuatro horas).

Entre los medios más comunes de transmisión se incluyen:

• Contacto directo: Las personas pueden infectarse al tocar las lesiones o fluidos corporales de un individuo con viruela del mono.
• Gotas respiratorias: La transmisión por vía aérea es posible durante un contacto cercano prolongado. Lo que ha llevado a que algunos casos se relacionen con actividades sexuales.
• Objetos contaminados: El virus puede sobrevivir en materiales como ropa, sábanas y toallas. Lo que facilita la transmisión si alguien entra en contacto con estos artículos.

Además, es posible que una persona embarazada transmita el virus al feto a través de la placenta.

Los Síntomas de la Viruela del Mono

Los síntomas de la viruela del mono suelen aparecer entre 3 y 17 días después de la exposición al virus. El período de incubación varía entre una y tres semanas. La enfermedad suele durar entre dos y cuatro semanas, durante las cuales las personas infectadas pueden presentar una combinación de los siguientes síntomas:

• Fiebre: Uno de los primeros síntomas que aparecen.
• Dolor de cabeza: Intenso y persistente.
• Dolores musculares y en la espalda.
• Hinchazón de los ganglios linfáticos: Un síntoma distintivo que diferencia a la viruela del mono de otras enfermedades similares.
• Cansancio extremo: Acompañado de escalofríos.
• Erupción cutánea: Generalmente aparece entre uno y cuatro días después del inicio de la fiebre. Esta erupción suele comenzar en el rostro o las extremidades y luego se extiende al resto del cuerpo. En el brote de 2022, se observó que la erupción a menudo empezaba en la zona genital, boca o garganta.

El sarpullido pasa por varias etapas antes de curarse. Primero, las manchas rojas planas se convierten en ampollas llenas de líquido. Que luego se llenan de pus antes de formar una costra que eventualmente se desprende.

Durante el periodo en el que la persona presenta síntomas, es posible que transmita el virus a otros. Las personas continúan siendo contagiosas hasta que las lesiones cutáneas se curan completamente y todas las costras se han caído.

Prevención y Medidas de Control

Para evitar la infección o la propagación de la viruela del mono, es esencial adoptar medidas preventivas adecuadas, especialmente durante brotes conocidos. Algunas de estas medidas incluyen:

• Evitar el contacto directo con personas infectadas: Si alguien presenta erupciones o síntomas compatibles con la viruela del mono. Es fundamental evitar el contacto físico cercano.
• Aislar a las personas infectadas: Aquellos diagnosticados con la enfermedad deben permanecer aislados hasta que las costras de las erupciones hayan desaparecido por completo.
• Lavar las manos con frecuencia: El lavado de manos con agua y jabón o el uso de desinfectante a base de alcohol. Es una herramienta crucial en la prevención.
• Evitar el contacto con animales salvajes: Dado que los animales pueden ser portadores del virus. Es importante evitar el contacto con aquellos que podrían estar infectados.

Tratamiento y Vacunación

No existe un tratamiento específico aprobado exclusivamente para la viruela del mono. Pero algunos antivirales, como el tecovirimat y el brincidofovir, pueden ser útiles en su manejo. Estos medicamentos  han sido diseñados originalmente para combatir el virus de la viruela humana, y por su similitud con el virus de la viruela del mono, son efectivos en ciertos casos.

Las vacunas que se desarrollaron para la viruela también son útiles para prevenir la viruela del mono. Entre las vacunas disponibles, Jynneos y ACAM2000 son las más conocidas. Pueden utilizarse en personas con alto riesgo de exposición, como trabajadores de laboratorio o quienes hayan estado en contacto con casos confirmados.

Brotes y Emergencia Sanitaria

Aunque la viruela del mono es endémica en África Central y Occidental, se han reportado casos en otros países fuera de África. Incluidos Estados Unidos y diversas naciones europeas.

El brote mundial de 2022, que afectó a más de 75 países. Esto impulsó la declaración de emergencia sanitaria internacional por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS).

La viruela del mono puede tener complicaciones graves, como cicatrices permanentes en la piel, infecciones secundarias y, en casos raros, la muerte. Sin embargo, el virus responsable de los brotes recientes, predominantemente el clado II, tiene una baja tasa de letalidad.